El relato de la gran mayoría de quienes viven en alguno de los 46 campamentos de nuestra ciudad es muy coincidente. Buena parte está allí por un asunto de recursos, de pobreza, porque el dinero ganado simplemente no le alcanza para habitar una vivienda y menos poder comprar alguna.
Eso es básico para entender por qué la cifra de estos asentamientos informales sigue al alza en la región y también para explicar por qué siete de cada diez habitantes son inmigrantes.
Nadie quiere vivir sin agua, luz, bajo peligro, en condiciones difíciles, como allí ocurre; no se trata de una cuestión de opción, sino de una necesidad.
Allí puede estar una respuesta al por qué el número de estos asentamientos se multiplicó por diez en la última década en nuestra región. No cabe duda que el vertiginoso crecimiento de la ciudad y el fenómeno inmigratorio hicieron lo suyo, pero también la ausencia de lo público que no hizo ofertas de inmuebles para los sectores más desposeídos durante largos años. Eso debe asumirse y reconocer como un retraso enorme.
El Catastro Nacional de Campamentos, elaborado por Techo Chile, da cuenta que la Región pasó de 19 de estos asentamientos y 632 familias en 2007, a 60 sitios habitados que suman 6.771 familias en 2017, con unas 20 mil personas están afectadas por esta realidad en la región, considerando que se ha hecho un cálculo de tres habitantes por hogar. El informe detalla que de los 60 campamentos, 46 están ubicados en la capital regional, 7 en Taltal, 6 en Calama y 1 en Mejillones.
Debe decirse que la única opción para remediar esta realidad es iniciar una agresiva política de vivienda que de paso dinamizaría la economía local.
Es cierto que en la actualidad el Serviu desarrolla ocho proyectos de viviendas sociales, de los cuales hay tres bastante avanzados en la capital regional, los que darán solución a poco más de 300 familias, pero ese número sigue siendo insuficiente considerando la magnitud del fenómeno.
Siendo honestos, la solución demorará años, pero mientras más urgencia apliquemos, incluyendo a los afectados, mejor será para todos.