El Gobierno dijo ayer que se apresta a "defender" la aprobación del proyecto de ley que despenaliza el aborto en tres causales en el Tribunal Constitucional, luego de que Chile Vamos oficializara que acudirá a esa instancia debido a que la iniciativa "relativiza el derecho a la vida".
El bloque opositor presentaría dos requerimientos al TC para impugnar el proyecto. Uno está a cargo de senadores de la UDI y RN, mientras que otro cuenta con el apoyo de los diputados opositores. En ambos se cuestionan distintos argumentos para cada una de las tres causales de la iniciativa, poniendo un foco especial en aspectos cuestionables en la objeción de conciencia.
El senador Alberto Espina (RN) defendió la decisión de Chile Vamos de acudir al Tribunal Constitucional, ya que "es parte de las reglas del juego democrático". "El TC ha fallado muchas veces en contra de lo que nosotros opinamos, en contra de la Ley Emilia, contra una serie de cosas, y es la institucionalidad que existe en Chile", afirmó el senador por La Araucanía.
Maratónico debate
Luego de la maratónica discusión y votación en el Senado, que se extendió a lo largo de toda la noche, el proyecto de ley del Gobierno que despenaliza la interrupción voluntaria del embarazo en tres causales inició ayer su tercer trámite en la Cámara de Diputados. El debate continuará hoy, luego de lo cual la iniciativa será votada a las 12.30 horas.
Postura del gobierno
La ministra de la Mujer y Equidad de Género, Claudia Pascual, comentó que "este proyecto remite a convicciones distintas y personales; además, siempre ha habido libertad de opinión. Tenemos parlamentarios que desde el primer mes de la tramitación de este proyecto han planteado que recurrirán al Tribunal Constitucional", dijo en el Senado, tras el debate que terminó tras 18 horas en la sede del Legislativo.
"Por lo tanto, como Gobierno nos hemos preparado para ese escenario y lo vamos a defender en el TC", aseguró.
Debate en la cámara
En el debate de ayer, el diputado Juan Manuel Edwards (ex RN), dijo que "los abortistas son sucesores naturales de los esclavistas, de los colonialistas, de los nazis y de los comunistas", mientras que su par UDI David Sandoval calificó de "hipocresía" el hecho de que "se ha llorado por materias que han impactado en el corazón y no son capaces de soltar una lágrima por los miles de niños que Chile no va a tener en los próximos años con esta ley maldita".
Al fundamentar su apoyo, el diputado Claudio Arriagada (DC) planteó que "no se puede imponer, por razones religiosas , que otros tengan conductas que provienen, supuestamente, de mi religión". El radical Alberto Robles agregó que "si una mujer quiere seguir con su embarazo puede hacerlo, pero si quiere interrumpirlo, porque no habrá vida, también puede".