Rodrigo Valdés, ministro de Hacienda calificó de "desafortunadas e irresponsables" las declaraciones de Luis Mesina, líder de la coordinadora "No + AFP", quien recurrentemente ha llamado a los cotizantes a cambiarse al Fondo E -el más conservador del sistema-, lo que tiene por objetivo mayor terminar con el sistema de administradoras de fondos de pensiones.
La agrupación ha sido crítica con las AFP y las responsabiliza de las bajas pensiones que hoy son entregadas en el país.
Sin embargo, el llamado de Mesina fue malo para los cotizantes: Quienes cambiaron sus ahorros al Fondo E, dejaron de ganar entre $2.343.844 y $403.988 producto de la menor rentabilidad del mismo, dependiendo del segmento del cual provenían, según análisis de la Asociación de AFP.
Desde un punto de vista técnico, la elección del fondo debe hacerse a base del riesgo en que el trabajador quiere incurrir, a su edad y no a llamados políticos.
Ciertamente el tema de las pensiones es complejo en Chile. Los estudiosos del tema insisten en la necesidad de -por ejemplo- alargar el período laboral para mitigar el incremento de la esperanza de vida. Si bien el Gobierno entregó los lineamientos principales sobre el proyecto de ley que presentará, los expertos creen que un eventual aumento en la edad de jubilación parece haber quedado fuera de esta iniciativa.
Aún así, el Ejecutivo ha adelantado que se buscará crear mecanismos de incentivo que permitan que las mujeres posterguen el retiro.
Al final, el reclamo por las bajas pensiones está centrado erradamente en el fin de las AFP, cuando el problema son los bajos montos ahorrados, producto de reducidos salarios, de lagunas previsionales, de cotizaciones por un sueldo base y no por el total de dineros que perciben los trabajadores.
El análisis puede ser impopular, pero no hay otra explicación. Eliminar el sistema u oír llamados que caen en el populismo es un error completo y la gente debe analizarlo en detalle para entender de qué estamos hablando.