"El problema es evidente, tanto por la cantidad como por el patrón de consumo"
En respuesta a los reclamos expresados a este medio por el presidente de la Asociación Pro Consumo Responsable de Bebidas Espirituosas (Aprocor), Juan Pablo Solís de Ovando, respecto a las fallas en la medición que estaría siendo utilizada por el Gobierno sobre el consumo total de alcohol en Chile, que según datos de la OMS llegaría a 9,6 litros per cápita al año y según el sector a 6,4 litros; además de quejas por el cálculo del ingreso de alcohol ilegal, Felipe Leyton, jefe del Área de Prevención del Consumo Abusivo de Alcohol de SENDA, cuestionó las estimaciones existentes respecto del "mercado negro" del alcohol ilegal del país y rechazó que existan errores en la metodología y recolección de datos con los que SENDA lleva a cabo las políticas públicas sectoriales.
"Para SENDA y para el país no es relevante si el consumo es de 9,6 litros o de 6,3 litros de alcohol puro per cápita, sino más bien cuáles son los problemas con los que nuestras familias se encuentran en el día a día", afirmó el directivo del ente estatal ligado a la prevención del consumo de este tipo de sustancias.
Un informe de Aprocor encargado a Euromonitor Internacional reveló que el consumo de alcohol en Chile es de 6,4 litros puro per cápita anual en la población mayor de 15 años, de los que 6,3 litros representan alcohol registrado y 0,1 litro es alcohol ilegal. La cifra rebaja fuertemente el dato entregado por la OMS en el consumo de alcohol ilegal, que produjo molestia en la industria. ¿Existieron errores en los datos entregados por la OMS?
-El ejercicio realizado por APROCOR es una estimación de alcohol ilegal circulando en el país, que es realizada en base a datos disponibles, como Odepa, SAG, Exportaciones, entre otras. Por ejemplo, la cantidad de malta ingresada o la cantidad de uva cosechada destinada a la producción de alcohol, datos a lo que se resta la cantidad de alcohol legal producido. El margen que se obtiene en este ejercicio es el que se denomina alcohol ilegal. Esta estimación, al igual que la de la OMS, no es más que una forma de calcular el alcohol ilegal disponible. Es una forma de cálculo que entrega una aproximación a la cantidad de alcohol ilegal, pero no es un dato exacto. Con esto no queremos decir que es un ejercicio en vano, sino más bien que tanto la OMS como Euromonitor realizan estimaciones. Sin embargo, cuando revisamos la forma de recolección de datos del estudio de Euromonitor nos damos cuenta que la chicha de manzana producida ilegalmente en el país no está considerada, ya que no hay forma de obtener registro de este tipo de producción. Esto nos lleva a cuestionar cuán certeras son las estimaciones de mercado negro.
-La data de la OMS en 2014 indicaba que en Chile se tomaban 9,6 litros per cápita y que era el país de Latinoamérica donde más se tomaba. La industria adujo "graves errores en su metodología y recolección de datos", ¿por qué se genera esta situación?
-No hay graves errores ni en la metodología ni en la recolección de datos. Ambos estudios trabajan con los mismos datos pero utilizan supuestos distintos. Lamentablemente, Euromonitor no hace explícito cómo trabajó estos datos, no indica cuáles son los que considera y cuáles no, tampoco los supuestos que utiliza para hacer las estimaciones. Esto impide hacer una comparación más clara y ver dónde están las diferencias. De todos modos, para SENDA y para el país no es relevante si el consumo es de 9,6 litros o de 6,3 litros de alcohol puro per cápita, sino más bien cuáles son los problemas con los que nuestras familias se encuentran en el día a día. Cuántas vidas se han perdido producto del consumo de alcohol, qué daños a la salud se han producido y cuánto gasto fiscal se dirige a tratamiento, accidentes, detenciones, violencia intrafamiliar, etc. El problema del alcohol es evidente en nuestro país, tanto por la cantidad de consumo como por el patrón de consumo. Los niños comienzan a consumir desde los 13 años, y el consumo en jóvenes entre 19 y 25 años es de ocho vasos promedio cada día de consumo. En un día promedio, una persona consume cinco tragos, es decir, el chileno toma para emborracharse, y eso es preocupante.
Los efectos de este tipo de consumo saltan a la vista y explican, por ejemplo, que en el último estudio AVISA disponible el alcohol sea el responsable de 12% del total de la carga enfermedad atribuible en Chile. Esto significa que es responsable del 12% de la muerte, enfermedad y discapacidad que sufren los chilenos. Estos datos son determinantes y tanto SENDA como Minsal estamos preocupados de cómo disminuir esta cifra a través de políticas de salud públicas eficientes.
Lucha contra el alcohol
-Según los antecedentes aportados por la industria, nuestro país se encuentra en la posición 12 entre 20 países en Latinoamérica y 25 entre 36 naciones en América. A nivel OCDE Chile queda en la casilla 24 entre 27 países. ¿Cómo lee estos resultados?
-Con los antecedentes entregados, lo lógico es que se evalúe el problema en su totalidad, y no sólo en referencia a una cifra. Ni tampoco al lugar del ranking en que estaría Chile, en caso de que esta estimación fuera la correcta.
-Según el presidente de Aprocor, en el Gobierno hubo "desidia" al acoger estas cifras de la OMS como ciertas. ¿Qué responde a ello?
-En SENDA y en otras reparticiones del Estado hay una preocupación permanente por este tema, y como un servicio serio consideramos y trabajamos con datos entregados por organismos internacionales, autónomos, que no presentan conflicto de interés frente al tema de alcohol u otros. Adicionalmente, y dado el alcance de su trabajo, la información que nos entregan nos permite observarnos y compararnos con otros países, tanto a nivel de evolución del problema como de las posibles medidas eficientes que podemos tomar para hacerle frente a este problema de salud pública. La OMS es para nosotros un referente de trabajo, la información que entrega en este y otros temas es considerada como un oficial, y particularmente en este caso, donde el dato es co-construido con los ministerios encargados de estos temas. Como Gobierno y Estado seguiremos dándole la prioridad que corresponde a un problema tan complejo y amplio en nuestro país.
-Independiente del ajuste de datos que plantea la industria, ¿de qué modo el Gobierno está enfocando la lucha contra el consumo problemático de alcohol?
-SENDA está apostando a que los grupos de riesgo, como automovilistas, embarazadas o menores de edad, no consuman alcohol. Y esperamos que el resto de la población se vincule de manera sana con esta sustancia, moderando su consumo a un nivel de bajo riesgo. Contamos con programas preventivos que se inician desde el nivel preescolar, que buscan generar una cultura preventiva en materia de alcohol y otras drogas desde la primera infancia. Hoy llegamos a 2,5 millones de niños y niñas de más de nueve mil jardines infantiles, escuelas y liceos. Contamos con el programa "Tomemos Conciencia", que aborda directamente el riesgo de consumo en la población, revisando las atribuciones que la ley 19.925 entrega a los municipios en relación a temas de venta a menores de edad, patentes, horarios de venta, etc. La idea es que tanto el consumo de alcohol como el expendio se den de forma responsable. En materia de fiscalización a automovilistas, SENDA, en conjunto con Carabineros, ha aumentado el número de controles aleatorios a conductores, pasando de los 45 mil que se realizaban en 2012 a más de 220 mil el año pasado. De manera complementaria, estamos trabajando en una mesa intersectorial en el diseño e implementación de un Plan de Acción de 60 medidas para enfrentar de manera seria y responsable esta materia.
"No hay graves errores ni en la metodología ni en la recolección de datos. Ambos estudios trabajan con los mismos datos pero utilizan supuestos distintos". "En un día promedio, una persona consume cinco tragos de alcohol, es decir, en promedio el chileno toma para emborracharse, y esto es preocupante como país"."