José Luis Ramírez M.
Una de las tasas de rechazo de licencias médicas más elevadas del país registró el año pasado la Región de Antofagasta, indica un estudio de la Superintendencia de Seguridad Social.
Según tales datos, durante 2016, el 76,5% de los usuarios del sistema (Fonasa e isapres) solicitó el subsidio, lo que equivale a 169.016 documentos extendidos. De éstos, sin embargo, 19.201 fueron rechazados, cifra que representa el 11,4%.
A nivel nacional la tasa de rechazos fue de 8,4% (tres puntos más baja), con 421.267 solicitudes desestimadas sobre un total de 5.027.060 licencias.
Por regiones, la mayor cantidad de rechazos las registraron Tarapacá (13,7%), O'Higgins (12,1%) y a continuación Antofagasta, mientras que las menores tasas las tuvieron Arica y Parinacota (5%), Maule (6,9%) y Los Ríos (7,2%).
El reporte de la superintendencia indica también que en Antofagasta las isapres rechazaron el 18,3% de las licencias presentadas. Fonasa, por su parte, rechazó el 7,3%.
Patologías
El agente zonal de la Superintendencia de Salud, Javier González, dijo que aunque el estudio no ahonda las causas de la mayor tasa de rechazos que ostenta Antofagasta, es posible relacionar este fenómeno con el tipo de patologías médicas que predominan en la región, que son las traumatológicas y osteomusculares.
"Ahí hay un mayor ámbito de discrecionalidad respecto a los periodos de recuperación y, por ende, podría haber una tasa mayor de licencias médicas que se cuestionan, lo mismo que pasa con las patologías mentales, como depresión, que también tienen altos rechazos", apuntó.
González explicó que normalmente las licencias son rechazadas cuando el Compin o la isapre, según sea el caso, interpreta que los tiempos de reposo del trabajador no están debidamente justificados, sobre todo si se trata de periodos largos, como los que usualmente acompañan a este tipo de patologías.
En todo caso, destacó que cuando las licencias son rechazadas el trabajador tiene la posibilidad de apelar, y en tales oportunidades la estadística muestra que en definitiva la mayoría termina acogida.
Respecto a la mayor tasa de rechazos que se da en isapres (18,3% versus 7,3% de Fonasa), el agente zonal explicó que en esto lo que pesa son los diferentes criterios que aplican las comisiones médicas.
Además, planteó que el rechazo de licencias puede ser también un mecanismo de control de gasto para las isapres.
Hay que precisar que esta semana el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic, se refirió a este punto: "Esperamos que en el caso de las isapres ese control (para evitar el mal uso) no se haga a costa de los derechos de los trabajadores ni a costa de su salud", dijo tras entregar cifras nacionales.
Nacional
De acuerdo al estudio realizado por la superintendencia, en el país los principales diagnósticos corresponden a enfermedades mentales, osteomusculares y respiratorias (59%).
Los mayores usuarios de licencias son las mujeres, con una tasa de 122,7%, duplicando a los hombres, 57,2%.
Javier González destacó finalmente que en el tiempo se observa un uso más "racional" de las licencias médicas.
"No hay un uso tan fuerte de licencias como había en el pasado, y eso quiere decir que el sistema funciona, y que no obstante los problemas que pudiere tener, es un sistema racional y justo", enfatizó.