Apec 2019 en Chile
De acuerdo al análisis de los personeros públicos, nuestra región tiene potencial para albergar citas específicas del gran encuentro a desarrollar a lo largo de 2019 entre las economías de Asia Pacífico. Ahora es el turno de que la sociedad local comience a movilizarse en ese objetivo.
Marcela Otero, encargada de asuntos multilaterales de la Dirección de Relaciones Económicas -Direcon- y segunda secretaria oficial -SOM- en Apec y Mario Artaza, secretario ejecutivo de Apec Chile 2019, son dos apasionados de una materia que a muchos puede resultar árida.
Ambos han dedicado su vida y esfuerzo a la integración de Chile al mundo, asunto respecto del cual no tienen dudas: Todos los acuerdos comerciales signados por el país han traído enormes beneficios, palpables para toda la sociedad.
Algunos ejemplos: El 93% del comercio bilateral con China tiene arancel cero, lo que ha permitido que aquí tengamos más marcas de automóviles de ese gigante, que en Shanghai; o que haya dos bancos de esa nación operando en el país y tres bancos chilenos en oriente.
Tales casos son replicables con otros países y bloques como Estados Unidos, Europa, Canadá y Corea, entre muchos otros, con los cuales nuestra nación logró distintos tipos de tratados de libre comercio.
Y debe tenerse presente que no todo son grandes operaciones entre estados y compañías.
El comercio electrónico de personas ha permitido, por ejemplo, que Correos de Chile mueva más de 17 millones de paquetes al año, solo gracias al comercio vía el sitio Alibaba, cuestión que se replica con otros espacios web de negocios.
Otero lo explicita.
A Chile le ha ido bien con el libre comercio, ese es un juicio categórico.
- Sí. Y es un juicio fundamentado. Las cifras nos respaldan. Por ejemplo, hasta antes de tener un acuerdo comercial con China exportábamos US$ 5 mil millones, al año siguiente, pasamos a US$ 10 mil millones. Lo mismo con México, o Estados Unidos, las cifras y exportadores lo dicen. El mensaje claro para nosotros es que necesitamos la integración, el comercio, la apertura de los mercados. Nosotros estamos en contra del proteccionismo.
Firmaremos acuerdos con Argentina, Indonesia, profundizaremos con China y seguiremos avanzando.
El problema es que en el mundo viene una ola en contrario. Muchos líderes pretenden desarmar estos acuerdos. Lo del presidente Donald Trump es un caso bien concreto, o el Brexit en el Reino Unido y otros países, particularmente desarrollados, que acusan que la globalización les ha hecho mal. ¿Cómo se observa ese fenómeno?
- Sí. Se observa en los foros multilaterales que hay un sentimiento de antiglobalización, pero al mismo tiempo genera en países como el nuestro, un ímpetu de trabajar mejor en comunicar los beneficios del libre comercio, porque muchas veces pasa que las críticas se unen sin tener los fundamentos detrás. Si tú profundizas un poco, te das cuenta que quienes están con ese discurso están con un computador o un auto al que no podrían acceder si no tuviéramos los precios que nos permiten los tratados de libre comercio.
Los ingresos que ha tenido el país por esto son espectaculares y no solo por el cobre; la agroindustria, por ejemplo, crece del orden del 9% anual y tenemos un gran potencial. Somos un país que pasó de ser netamente importador a ser exportadores reconocidos. ¡Somos el principal exportador de productos específicos a China! Entonces nuestro discurso no son solo palabras, son hechos.
Nuestra responsabilidad, como gobierno y hacedores de política comercial es que esos beneficios sean más claros y tangibles para todos los ciudadanos. La única forma de tener a la gente tranquila es que estén al tanto de lo que se está negociando, ellos deben saber.
Más allá de informar mejor las ventajas del libre comercio, hay cambios que hacer respecto de cambios que deba realizar Chile o los países en sus acuerdos, para que se noten más los beneficios de esta forma de construir sociedad.
- No sé si cambios, tal vez ingresar algunos temas, como por ejemplo, los de género, para dar cuenta que esto no es solo transacción, sino que son cambios culturales; lo mismo que disposiciones medioambientales, o laborales, que ya incluimos en el acuerdo con Canadá, del año 1996. Estamos hablando de que hagamos acuerdos con estándares laborales reconocidos internacionalmente. Estamos cumpliendo fundamentos de la OIT 1998, es decir, cumplimos con mejores estándares, lo que es de un enorme beneficio general porque nivelas hacia arriba.
Mario Artaza cita entonces que estos avances han sido apoyados de manera trsanversal por la clase política nacional.
Cita por ejemplo que el acuerdo entre Chile y China fue aprobado unánimemente por el Congreso, lo mismo que el ingreso de Chile a la OMC, es decir, hay una conciencia que Chile necesita del mundo para beneficiar su economía, para crecer, para traer tecnología, para formar parte de una comunidad interdependiente, globalizada.
"En Chile ya se superó hace mucho tiempo el cuestionamiento de estar o no estar en acuerdos bilaterales o multilaterales. A través de estos acuerdos hemos logrado que muchos jóvenes chilenos vayan a programas de vacaciones pagadas en Nueva Zelanda, Australia, en Corea, países europeos, ya se firmó con Japón. Somos un país donde su ciudadanía puede ingresar a EE.UU. de manera expedita con una visa especial".
Pero Marcela Otero es consciente que hay dificultades, por eso insiste que deben trabajar en informar qué implican estos logros.
"Más del 90% de nuestro comercio es vía TLC y el arancel efectivo es de 0,9%, somos de los países más abiertos del mundo. Pero hay gente que se siente al margen de estos beneficios y hay que hacerse cargo", apuntó.
En 2019 será realizado el foro de Asia Pacífico -Apec- nuevamente en Chile. Se trata de una de las reuniones más relevantes de la economía mundial. Apec partió en 1989 con 10 países y a la fecha congrega a 21 que se reúnen anualmente a conversar de todo, con temas acordados y con agenda abierta para los altos comisionados. Si bien los acuerdos que adoptan no son vinculantes sino que sólo de palabra, la zona Apec ha logrado sus propósitos pues si se echa un vistazo a las cifras tenemos que el PIB ha aumentado desde US$ 16 trillones en 1989, a más de US$20 trillones en 2016 lo que ha implicado un aumento de la clase media en varios países. Por lo anterior, Otero y Artaza visitaron la región con el fin de que la zona pueda ser una de las zonas receptoras de la cita en materias específicas. "Esta es una región que tiene potencial para hacer una reunión. Ustedes nos deben decir ahora, esto es lo que haremos, este es un trabajo participativo, donde la oferta de la región es lo fundamental", declaró Artaza, haciendo un llamado.
Chile y la
región en el camino de Apec