¿Cómo empezó este amor por las series? ¿Qué edad tenías y cómo sistematizaste lo que explicas en la introducción?

-No hubo un hito. Siempre me gustaron las series, sobre todo desde que mis amigos empezaron a tener televisión por cable, y además se fueron poniendo cada vez más buenas. Entonces, siempre seguí viendo, no más. El sistema -"Bogeda de citas", que sólo yo entiendo- lo empecé hace unos cuatro o cinco años, creo, y siempre le voy agregando reglas que después tengo que seguir. Es por lejos lo más ñoño que jamás he hecho o haré.

¿Cuáles son las mejores que están dando ahora y por qué?

-Amo las series y tengo mis favoritas, pero me cuesta hablar de "las mejores", porque depende de los gustos personales, sobre todo en esta época en que se estrenan cientos de series al año. Sí puedo hablar de las que más me gustan: "The Sinner", "I Love Dick" y "The Handmaid's Tale" fueron mis estrenos favoritos del año. De las no nuevas me quedo con "Master of None", "Rick and Morty", "The Leftovers" y "Better Things", que es mi favorita de este momento. Pamela Adlon es seca y en esa serie lo hace todo.

-¿Cómo fue que Ray Bradbury escribió el guión del capítulo 100 de "La dimensión desconocida"?

-En EE.UU. hay muchos guionistas que trabajan en una serie, pero además hay guionistas, o escritores o comediantes, a los que les pueden comprar un capítulo. En "La dimensión desconocida" los capítulos eran como películas cortas, no tenían relación entre si. El estilo de Bradbury coincidía totalmente con el de la serie. Entonces, entregó más de capítulo o idea de capítulo y ese fue el que se produjo. Que haya sido el 100, fue una decisión de la producción.

Daniela Lagos cuenta que la primera serie que le causó adicción fue "dawson's creek".

3 preguntas

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Daniela Lagos (1983) acaba de lanzar "Citas de series" (Libros del Laurel), una

selección de diálogos y frases que evocan el espíritu de cada serie. Es editora de televisión y publicó el año 2015, junto a otros autores, el libro de carátulas

"Vinilo chileno". Transmite sus ideas, además, en el canal de YouTube "Subtitulado".

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andrés lagos

Desde su debut, a comienzo de los 80, Juliette Binoche ha circulado por el cine de autor y el de industria con la misma fuerza. No hay duda de que su carrera tiene puntos bajos ("Los 33" es uno de ellos), pero cuando trabaja bajo las órdenes de autores brillantes -léase Louis Malle, Krysztof Kieslowski, Leos Carax o Bruno Dumont- puede alcanzar la gloria. No hay duda de que su colaboración con Claire Denis -una de las grandes cineastas contemporáneas, ex asistente de Wim Wenders y Jim Jarmusch, responsable de grandes películas como "Bella tarea" o "Nenette et Boni"- se enmarca dentro de este último tipo de ecuación, especialmente tomando en cuenta que "Un bello sol interior" es una de esas películas hechas a medida para el lucimiento de una actriz que siempre supo transmitir una mezcla de fuerza vital con pathos.

El padecimiento que marca a Binoche esta vez se relaciona directamente con la fuente que toma Denis como inspiración: "Fragmento de un discurso amoroso", la obra que convirtió a Roland Barthes en un fenómeno pop en Francia en 1977. Buscando derribar los lugares comunes sobre el amor, y diseccionar los tormentos que genera en el amante las quimeras de la esperanza romántica, el pensador concluye que "el enamorado es el semiólogo salvaje en estado puro. Se la pasa leyendo signos. No hace otra cosa".

Esa inquietud sin límites -y la convicción casi mística de que apareceré el "amor de la vida"- marca el conflicto interior de Isabelle (Binoche), una mujer divorciada, madre y artista visual, que tiene encuentros con hombres que arruinan sus expectativas amorosas a fuerza de comportamientos cuestionables (desde el abuso de poder al egoísmo). Ella, como siempre, actúa con los ojos y gestos. No está limitada a la palabra, aunque Claire Denis basa la dinámica de los personajes en largas escenas de diálogo. Y es ahí donde "Un bello sol interior" cobra fuerza y singularidad: en la desmesura de sus escenas. El manejo del tiempo no está al servicio de una historia sino que respeta el guión emocional de Binoche y las relaciones que entabla con otros personajes. Cada episodio aporta algo sobre el cuestionamiento principal de la directora. Denis construye un largometraje en fragmentos que están cargados de espesor emocional y, digamos, cuestionamientos filosóficos. Lo admirable es que lo hace con frescura, sin darle la espalda a la comedia (un género nuevo en su filmografía), y con un espíritu lúdico que tiene su punto alto en un cierre glorioso protagonizado por Gérard Depardieu.

"Un bello sol interior" es de esas pequeñas joyas que de tanto en tanto aterrizan en nuestra cartelera, una nueva oportunidad para apreciar el talento de la Binoche y un acto de justicia de las salas locales con la siempre estimulante obra de Claire Denis.

juliette binoche interpreta a Isabelle en "un bello sol interior".

la directora claire denis.

en resumen

En el 2018 veremos a Juliette Binoche en una nueva película de Claire Denis: "High life", co-protagonizada por Robert Pattinson.

Por Andrés Nazarala R