Carolina Collins/Agencias
Más de 70 años después del fin de la guerra más horrible que ha visto el mundo, la figura del primer ministro británico Winston Churchill se mantiene como un foco de interés para el cine y la televisión. Prueba de ello es que su figura fue el centro de la primera temporada de la aclamada serie de Netflix, "The Crown" (2016) y también lo es de "Las horas más oscuras", cinta que llegará la próxima semana a las salas nacionales.
La hora de churchill
En ella, Gary Oldman muestra su más dramática transformación física para encarnar al político que lideró una de las pruebas más desafiantes del siglo XX: dar la pelea contra la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.
El momento en el que el líder del entonces país más poderoso del planeta decidió dar la pelea y no negociar la paz con la Alemania de Adolf Hitler, es el que retrata "Las horas más oscuras".
"No puedes razonar con un tigre cuando tu cabeza está en sus fauces", dice Churchill en el cuerpo de Oldman en la cinta, en un momento clave de la Segunda Guerra, cuando la caída de Francia era inminente y Gran Bretaña se preparaba para afrontar la inminente invasión nazi con las fuerzas militares británicas arrinconadas en Dunkerque, Francia.
Ese es el momento en el que Churchill vivió su hora más oscura, con un Rey Jorge VI escéptico de su liderazgo, su propio partido en su contra y el peso del mundo sobre sus hombros.
Una hora en la que fue acompañado por su esposa, Clementine Churchill, interpretada por la británica Kristin Scott Thomas.
Así, la cinta transcurre en las cuatro semanas que transcurrieron entre mayo y junio de 1940 y en las que el coraje de Churchill cambió el curso de la historia.
El encargado de llevar a la pantalla este drama biográfico escrito por Anthony McCarten, es un hombre con experiencia en películas de época, el británico Joe Wright, conocido por sus adaptaciones de novelas trascendentales como "Orgullo y prejuicio", de Jane Austen, "Expiación", de Ian McEwan, y quizás la más ambiciosa de ellas, "Anna Karenina", de León Tolstói.
El rey en la pantalla
En la cinta, el actor australiano Ben Mendelsohn -el villano de moda gracias a la serie de Netflix "Bloodline" y por el spin off de la saga "Star Wars", "Rogue One"- encarna al rey Jorge VI, padre de la actual monarca Isabel II, a quien espera "no ofender", según dijo recientemente en entrevista con la agencia EFE.
"Para mí es un honor estar trabajando. Amo este negocio. Fue un placer que Joe Wright me quisiera para esto. Es como pedir a un actor mexicano hacer de Isabel II o el Duque de Edimburgo", dijo el australiano que ve como un privilegio haber tenido la oportunidad de interpretar a un personaje tan importante para la historia del Reino Unido, por haber asumido el trono tras la abdicación en 1936 de su hermano, Eduardo VII. "Lloré al leer el guión. Supe que si lo hacíamos bien, sería un momento bonito en la película", añadió el actor.
Pese a su escepticismo, el apoyo del rey Jorge VI fue clave para que Churchill fuera validado como líder.
"Esas escenas íntimas con Gary fueron la razón real por la que hice la película", admitió Mendelsohn, acompañado en el reparto también por Thomas, Lily James y Stephen Dillane, entre otros.
Jorge VI ha sido un personaje interpretado recientemente en la pantalla. Por Jared Harris en "The Crown" y por Colin Firth en "El discurso del rey", que le valió un Oscar.
"Son interpretaciones magníficas, pero yo preferí documentarme en las imágenes que tenemos de él. Imagino que su majestad verá la cinta porque es una obra relevante. Estoy seguro de que la reina guarda recuerdos muy vivos de lo que contamos en la película", declaró quien fue el encargado de interpretarlo en la cinta de Joe Wright que ha recibido buenos comentarios de la crítica.
El diario "The Washington Post" incluso la calificó como: "la película que necesitamos ahora mismo".