Jubilación de las mujeres
Noticia en el periódico: "Nadie está obligado a jubilarse a los 60 años. Si la mujer posterga hasta los 65 años su edad de jubilación, si sigue trabajando y cotizando, su pensión sube 45%".
Esto es verdad, pero no se puede generalizar. Hay profesiones que no tienen desgaste físico significativo. Supongamos una abogada, que además puede permitirse contratar a una persona que se haga cargo del trabajo doméstico de su hogar. Sin embargo, esta persona, que trabaja para la abogada, por mucho que cuente con máquinas y electrodomésticos, tiene un significativo desgaste al limpiar pisos, sacudir muebles, planchar ropa, hacer camas, cocinar, y un sinfín de otros menesteres...
Tampoco es el mismo desgaste para una profesora que se desempeña en una universidad que para la educadora que atiende guaguas o niñitos que requieren de atención máxima y permanente, o para quien que tiene a cargo cursos de adolescentes de 40 alumnos de los cuales varios son disruptivos, insolentes, o que necesitan atención especial.
Tampoco es el mismo desgaste para la enfermera que para la auxiliar, para la cajera que trabaja sentada y para la vendedora que está todo el día de pie.
Hay mujeres que tienen ayuda permanente en sus hogares: maridos cooperadores, madres o suegras que cuidan de sus hijos, automóvil para trasladarlos y repartirlos, mientras otras se levantan al alba y corren todo el día, duermen cinco horas, trabajan más de ocho y ejercen de mamás al cien por ciento.
Hay mujeres que a los 50 años están tan desgastadas que parecen tener 70. Hay mujeres que en sus días de vejez deben hacerse cargo de familiares ancianos, muchas veces postrados, y que deben hacer milagros con jubilaciones mínimas. Tantas mujeres que solo descansarán a la hora de su muerte.
La realidad de estos "genios" que opinan y sacan cuentas está tan lejos del mundo real que resulta insultante que den recetas aplicables en su entorno social, o para la elite santiaguina, pero que no sirven para el mundo real, ese mundo que no conocen.
Cecilia Castillo