Por muchos años, hemos sido serviciales a nuestra banderita, hemos entregado nuestros recursos naturales para hacer líneas de metros y teleféricos al centro del país, hemos llenado sus comunas de Pulmones verdes, además le hemos enseñado a todos nuestros hijos a bailar su baile centralista y ahora entregamos nuestras fuentes laborales. Como le escuché alguna vez a Luis Alberto Gaete: "Hemos sido fieles, usados y abusados".
Porque tenemos que ser el patio trasero de Chile, vivir de denuncias y levantar una voz que nunca ha sido escuchada.
¿Por qué no tenemos áreas verdes? Según un estudio de la Universidad Adolfo Ibáñez, tenemos apenas 1,3 m2 de áreas verdes por habitante en Antofagasta; 1,37 m2 en Iquique, muy lejos de los 9 m2 que recomienda la Organización Mundial de la Salud.
El Norte se ganó la peor educación escolar, según la Agencia de Calidad. El 57% de las unidades educativas de la Regiones del Norte son de nivel bajo o insuficiente, en el resto de Chile estas cifras no superan el 30%.
Seguimos perdiendo a nuestros seres amados por el cáncer, doblamos y triplicamos a otras zonas del país, tenemos estudios de prestigiosas universidades que revelan focos y problemas, seguimos sin soluciones por décadas.
Los problemas de migración jamás se hubieran resuelto para el Norte, si no hubieran llegados los haitianos a Santiago.
Los habitantes de esta zona debemos tomar las decisiones para el Antofagasta de los próximos 50 años, con un pensamiento crítico de la región que queremos construir, para combatir el desempleo, el sistema de turnos y la fuerte automatización que nos viene depredando.
Somos una región hermosa, la región de La Portada, del Valle de la Luna y del Desierto de Atacama, pero para el sur sólo somos una zona de extracción, hoy más que nunca como dice el título en Aymará: "No somos chilenos y menos bolivianos", somos nortinos descendientes de los aymara como Iquique y Arica, si no existe preocupación, creo perfectamente que debemos luchar por esta patria aymara que nos pertenece a todos los habitantes del Norte.
Es tiempo de seguir con el legado de Tomás Paniri, José Papic Radnic y Pedro León Gallo de la lucha por la autonomía, porque mientras esta se siga atacando, siempre habrá derecho a una legítima defensa.
Rodrigo Antilef Giacamán
Ingeniero comercial