Aún tenemos patria
Grata experiencia ha sido leer este tercer libro de la historiadora Soledad Reyes: "Manuel Rodríguez. Aún tenemos patria". Su motivación para investigar sería que no le parece justo que se hable de Rodríguez como instigador o delincuente o solamente como un guerrillero.
He disfrutado esta lectura de un texto ágil, entretenido y de gran seriedad en el trato con que la autora presenta el tema; no necesariamente de manera exhaustiva pero sí con seria y estudiada información. Considera autores de hoy como Alfredo Sepúlveda, Humberto Barrera, Juan Pablo Buono-Cuore, Gabriel Salazar, Ernesto Guajardo, Robert Harvey, Francisco Javier González y muchos otros. Pero también, lo que encuentro muy valioso y agradable, incluye referencias de los magníficos escritores aquellos que los mayorcitos hubimos de leer en nuestra juventud, como José Zapiola, Benjamín Vicuña Mackenna, Vicente Pérez Rosales, Mariano Latorre, Alberto Blest Gana y más...
Noto en el libro una intención de ecuanimidad, pero aun así, resultan emocionantes las citas que nos trajo la historia y que son compartidas por la autora, como lo que escribe Rodríguez a San Martín en 1816: "No quiero desamparar a Chile hasta morir o verlo libre". Su enérgica voz gritándole a O'Higgins : "quien no escucha al pueblo, no escucha a su alma". La arenga a los Húsares de la Muerte:…"Chile no sucumbe, y el enemigo antes pisará nuestras cenizas que doblar el cuello de los libres…¡Aún tenemos patria ciudadanos!"
Recuerda la cita de Guillermo Matta …"se presenta a sus amigos, reúne a los más osados, arenga en la plaza pública, fascina al pueblo con su mirada, lo reanima con la palabra, lo subleva con su entusiasmo y su eléctrico ardor le comunica".
Un acierto esta publicación que nos insta a no olvidar a Manuel Javier Rodríguez y Erdoíza, alevosamente asesinado el 26 de mayo de 1818. Y a recordarlo como patriota, abogado, político, militar, y hombre de bien, que no merecía una bala por la espalda.
Cecilia Castillo