Eugenio Sugg Gálvez
Confiado en que el repunte del crecimiento y la inversión en el país seguirá una trayectoria positiva, se mostró el presidente del Banco Central (BC), Mario Marcel. Su optimismo se sustenta en las positivas condiciones externas y la política expansiva que viene aplicando la entidad, la cual se mantendría al menos hasta la primera mitad de 2019.
Marcel presentará esta mañana en dependencias de la Cámara Chilena de la Construcción Antofagasta (CChC) el Informe de Política Monetaria (IpoM) correspondiente a junio, el cual elevó el piso de la proyección de crecimiento para 2018 a 3,25%, y subió las estimaciones de inflación que a diciembre llegaría a 2,8%, mucho más que el 2,3% del informe previo.
¿Cómo evalúan la evolución de la economía nacional durante los últimos meses?
-El último IPoM presentado hace unos días a la Comisión de Hacienda del Senado ratifica la trayectoria que se había previsto para la economía chilena. Se ha ido produciendo una recuperación importante del crecimiento, una inflexión en el ciclo económico pasando de una fase relativamente débil -que duró varios años- a una de mayor crecimiento e inversión que es lo que hemos notado especialmente durante los primeros meses del año.
¿Qué sustenta ese mayor crecimiento?
-La inversión ha tenido un comportamiento más dinámico de lo que esperábamos, incluyendo la inversión en maquinaria y equipos, algo en minería con planes en compañías como Codelco y en construcción que había estado cayendo durante buena parte del año pasado, ya dejó de hacerlo y comenzó a mostrar signos de mayor dinamismo.
Amenazas
¿Como proyectan la trayectoria de la economía para lo que resta de 2018?
-Lo que estamos proyectando es un crecimiento entre 3,25% y 4% para este año, mientras para 2019 esperamos un crecimiento entre 3,25% y 4,25% y para 2020 entre 3% y 4%, es decir, proyectamos que lo que estamos viendo ahora tenderá a mantenerse durante los siguientes años porque las condiciones externas para la economía chilena se mantienen muy positivas, porque no tenemos grandes restricciones macroeconómicas para crecer -todavía estamos por debajo de nuestro potencial- y también porque hemos tenido durante todo este tiempo una política monetaria expansiva y eso inyecta mucha más energía a la economía.
¿Cuáles serían las principales amenazas a esa proyección?
-Los principales riesgos vienen del lado externo, en particular nos preocupan los conflictos comerciales que se han ido agudizando, que haya cambios en las percepciones de riesgo de los mercados financieros que encarezcan el crédito para el país y nos preocupa que algunos países emergentes vayan teniendo dificultades como ocurrió hace poco en Argentina. Hay elementos que hay que monitorear, pero afortunadamente la economía chilena -por el marco de política macroeconómica y por tener un tipo de cambio flotante- tiene amortiguadores que le permiten reducir el impacto de estos shocks externos.
Minería
¿Cómo analizan la evolución del sector minero?
- Esta es una región que se benefició mucho de la expansión minera durante los años en que el precio del cobre estuvo muy alto. Lamentablemente, eso fue seguido por una caída importante de la inversión durante cuatro años seguidos y eso afectó a la región de Antofagasta. En la medida que se han ido afirmando los precios para el cobre -ya llevamos un buen tiempo con precios sobre los US$3- eso hace surgir nuevas oportunidades de inversión.
Grandes proyectos todavía no se observan, porque requieren un periodo de maduración importante, pero sí vamos viendo algunos mejoramientos de faenas y planes que van surgiendo desde las empresas, y esperamos que las condiciones del mercado e internacionales así lo sigan permitiendo.
¿Cuál cree será el comportamiento de la inflación?
-Durante el último tiempo habíamos tenido la preocupación que la inflación se quedara muy abajo. Hoy está en 2% y hubo meses que estuvo bajo esa cifra, comparada con la meta del Banco Central que es de 3% anual en un horizonte de 24 meses, y eso fue por efecto que el dólar estuvo muy bajo, pero en la medida que se ha fortalecido la actividad, se revirtió la trayectoria del dólar -ha estado subiendo- y el aumento del precio del petróleo esperamos que la inflación vaya aumentando gradualmente en lo que queda de este año y que en el plazo de dos años esté en torno al 3%.
Estamos bastante bien encaminados, creemos que una inflación del 3% es lo que se necesita para que la economía tenga más capacidad de ajuste en el tiempo y ajustaremos la dosis de política monetaria para que esa sea la trayectoria.
¿Está en el escenario del BC mayores aumentos en el precio del petróleo?
-El supuesto que tenemos para este año es de US$67 el barril, lo cual es un 10% más que lo que teníamos en el IPoM de marzo, está por debajo de los precios spot que hay hoy, suponemos que habrá alguna amortiguación de estas alzas -ya hubo anuncios de la Opep que sugieren que tendería a estabilizarse-, pero igual es más alto de lo que estábamos esperando y eso tendrá efecto sobre la inflación y efecto no muy grande sobre la actividad porque somos un país importador.
"Grandes proyectos mineros todavía no se observan, porque requieren un periodo de maduración importante, pero sí vemos mejoramientos de faenas y planes que surgen de algunas compañías"."