"El cáncer no me la va a ganar; seguiré corriendo hasta el fin"
Cuando ya se sentía mucho mejor y repuesto del atropello que sufrió hace seis meses mientras trotaba por la Costanera, cerca del sector de Llacolén, el atleta de 78 años, con más de 58 (años) de trayectoria, Hipólito Palma, recibió, la triste noticia de que padece cáncer óseo.
Un viejo cáncer a la vejiga, del cual se repuso completamente hace ya 20 años (cuando se la extirparon), dejó células cancerígenas que durante todo este tiempo, durmieron pacientes hasta que, con el atropello, se metieron en la fractura de su pelvis, derivando eventualmente en un cáncer de huesos, explica don Hipólito.
No obstante, y conforme lo ha hecho siempre en su vida al momento de enfrentar situaciones complejas, él no se desanima. Sabe que en la medida que continúe con el tratamiento (una inyección cada tres meses), y continúe haciendo ejercicio, podrá torcer la mano del destino otra vez, para continuar desarrollando su pasión por correr.
¿Cómo toma este nuevo obstáculo que se presenta en su vida?
-Uno, como ser humano, debe pensar -al menos eso pienso yo-, que uno siempre debe seguir viviendo (...) en realidad, en este momento, no siento ningún dolor ni nada, puedo andar corriendo, trotando y caminando. Todo, lo que me ha permitido sentirme mejor anímicamente.
Cuando me hicieron las radiografías en Santiago, para confirmar la enfermedad, obvio que fue un golpe, pero no le doy mucha importancia; el hombre debe seguir insistiendo y darlo todo mientras pueda. La vida hay que vivirla hasta el último.
¿En qué consiste el tratamiento que debe seguir? ¿Cómo lo complementará con su vida deportiva?
-Cada tres meses, debo ponerme una inyección que cuesta más de $280 mil. Eso lo tendré que hacer hasta que me muera. Las inyecciones son para mantener focalizado el cáncer y evitar que se ramifique a otros sectores. En la medida que me inyecte estaré bien. Además hago ejercicio y eso para mí es una fuente inagotable de ánimo, lo que permite sentirme mejor; para mí el correr es salud.
Respecto a cómo lo complementaré con mi vida deportiva, bueno, se ve afectada un poco. Por ejemplo, el próximo mes se viene un nacional senior de atletismo, queríamos ir con mi señora (Hermosina Tapia), pero como tenemos que tener la plata para las inyecciones, el nacional ya pasó a segundo plano. En eso me ha afectado, ya que queríamos ir.
Mundial de España
Tanto Hipólito, como su esposa, Hermosina Tapia, vienen de participar de un campeonato de la especialidad. Aquí, Palma lograría el sexto lugar dentro de la categoría Senior.
Famosos son sus logros de 2015, cuando fue vicecampeón en Lyon, Francia y en 2014, campeón del Mundial de Atletismo en el certamen realizado en Porto Alegre, Brasil.
¿Cómo se sintió durante su participación en el mundial de España; su enfermedad lo condicionó de alguna forma?
-No mucho, pero la verdad es que solo participé en una prueba, en la de los 2 mil metros con obstáculos, que esa es mi prueba madre. Ahora bien, íbamos corriendo 10 deportistas, pero tuve un problema de visión y no me fije en un obstáculo y perdí ventaja. Aún así llegué en la sexta posición, lo cual no está mal para mí.
¿De dónde saca tanta fuerza o energía para mantenerse positivo frente a las adversidades?
-Del deporte. Para mí es mi salud, sé que si me boto a la cama y dejo de salir a correr, como hago todos los días con mi señora o mi perrita, me voy a enfermar más. He corrido desde siempre, tengo una vida sana, todos los días me como mi avena con leche y miel en la mañana, lo más sano. Eso me ha permitido comprobar que el deporte es lo mejor para sentirse bien. A esta altura de mi vida, correr para mí es como respirar o comer.
Tratamiento
Don Hipólito recibe una pensión militar, de su tiempo en el Ejército como armero, la que ronda los 600 mil pesos. Con este dinero mantiene su casa y compra sus remedios. Ahora bien, el tratamiento, tiene un costo que, vaticina, dificultará su economía y por ende el tratamiento mismo.
Por eso, están realizando una rifa para recaudar recursos. Quienes deseen aportar, pueden contactarse al celular de su esposa (Hermosina Tapia), al número de contacto: +56977167538.
¿Le asusta no poder costear el tratamiento?
- Igual se complica, pero bueno, así es la vida. Ahora con esto, mi esposa y yo cambiamos nuestras prioridades, ya no hay dinero para competencias, sino para la salud.
"Uno como ser humano debe pensar, al menos así pienso, en que hay que seguir viviendo (...) si me tiro a morir a la cama, será mucho peor; por eso el ánimo es vital". "Para mí, el deporte es mi salud. Lo he hecho por tanto tiempo que ya es como respirar o comer. Sé que si sigo el tratamiento y hago deporte, estaré bien"."