La economía regional junta números azules antes de terminar complejo 2018
INDICADORES. Incipientes señales de repunte muestran varios sectores económicos de la zona.
Números positivos en la mayoría de sus ramas está mostrando la economía regional. Antes de finalizar el año, la mayoría de los indicadores y datos locales dan cuenta de una incipiente recuperación de la actividad, impulsada por una recuperación del empleo en el sector minero.
Efectivamente, pese a las grandes expectativas que había en torno a la reactivación económica con el arribo del nuevo gobierno, la sensación es que ésta tardó -al menos en Antofagasta- más de lo esperado.
"Chile venía con una economía herida, como un atleta desentrenado y siempre requiere tiempo retomar la mejor forma, no obstante los progresos que ha logrado durante el año son innegables. Durante el primer semestre creció un 5%, se espera un 4% en el año y para el próximo entre 3% y 4%, eso más que duplica el crecimiento del año pasado y los cuatro anteriores", explicó hace pocos días a este Diario el ministro de Economía, José Ramón Valente.
Según él, "en la medida que eso se vaya acumulando, la gente lo va a ir sintiendo mucho más firme. Lo primero ha sido transformar empleos que eran precarios en empleos con contrato y sólidos y echar a andar proyectos que estaban dormidos".
Repunte
Económicamente éste fue un año complejo para la región. La recuperación y estabilización del precio del cobre durante el segundo semestre de 2017 no alcanzó para reactivar la inversión sectorial.
La región comenzó el año con la tasa de cesantía más alta del país y la mayor desde que se tenga registro en la zona: 10,9%.
Y aunque durante los primeros meses la tasa no disminuyó -debido principalmente al aumento de la fuerza laboral- la economía regional se mantuvo generando empleo y en la última medición arrojó una tasa de 8%, es decir, casi tres puntos porcentuales menos que a comienzos de año.
Y si el empleo anda bien, eso contagia al resto de los indicadores. Así, las ventas de autos están viviendo uno de sus mejores años en mucho tiempo, la construcción muestra claros signos de recuperación, al igual que las ventas de los supermercados.
El Inacer viene de dos periodos consecutivos de crecimiento en el primer y segundo trimestre -aunque muy condicionados por la huelga de Escondida en 2017-, mientras la producción minera y el valor de las exportaciones regionales también muestran importantes alzas en las últimas mediciones entregadas por el INE.
Repunta la actividad económica
A octubre de 2017 el Inacer de Antofagasta acumulaba cinco periodos consecutivos a la baja. Sin embargo, los últimos tres trimestres la actividad económica regional logró un repunte de 1,9%, 14,1% y 6,3%, no obstante, las últimas dos mediciones -correspondientes a los dos primeros trimestres de 2018- están fuertemente influenciadas por la baja tasa de comparación derivada de la huelga de Minera Escondida, efectuada en 2017. Con todo, Antofagasta presenta un crecimiento acumulado del 10% este año, situándose en el tercer lugar entre las regiones del país, después de Magallanes y O'Higgins, que acumulan alzas de 12,6% y 10,8%, respectivamente.
Cae la tasa de desocupación
Uno de los aspectos más sensibles de la economía es el empleo. La región de Antofagasta inició el año con una tasa de desocupación de 10,9%, la más alta del país y de la región desde 2010, cuando es posible comparar y comenzó a aplicarse esta encuesta. Pese a que las mediciones siguientes la tasa no cayó, la economía regional se mantuvo generando empleo y ya al promediar el año los números comenzaron a mejorar. En la última medición del INE, correspondiente al trimestre junio-agosto, la tasa regional llegó a 8%, cayendo 1,3 puntos porcentuales respecto del mismo periodo de 2017, pero bajando casi tres respecto a cómo había iniciado este año.
marcó el desempleo en la última medición del INE. Esto es tres puntos más bajo que a principios de año. 8%