Alejandro Ahumada Rojo

Fue una de las iniciativas más controvertidas en materia de política social de erradicación de campamentos y vivienda sociales en la región. 110 familias fueron trasladadas desde sectores de alto riesgo aluvial de Antofagasta hacia La Chimba, donde se creó el primer barrio transitorio de la región.

Un lugar pensado no solo como provisorio, sino también como de aprendizaje para la vida comunitaria y el acceso a una vivienda definitiva.

Tras 15 meses de la experiencia, la mayoría de las familias cumplen con los requisitos para acceder al subsidio habitacional, sin embargo, sus perspectivas para obtener una solución definitiva es incierta.

Traslado

Corrían los primeros días de diciembre del 2017 y las primeras 18 familias llegaban hasta el nuevo campamento "Luz Divina 7" en el sector de La Chimba.

Luego de un largo proceso de diálogo e intervenciones de las autoridades de la época, accedían a dejar las zonas de riesgo donde vivían y eran trasladados -con apoyo de efectivos militares- al sector La Chimba.

"Que fueran trasladados acá no sólo implica habitar una vivienda transitoria, significa aprender a convivir comunitariamente. Por eso el reglamento interno es tan importante para todas las familias. Hay normas que cumplir, hay reglas que respetar, porque creemos que servirán cuando tengan que dejar este barrio", señala Susana Véliz, presidenta del Comité de Vivienda "Luz Divina 7".

La dirigenta resalta la responsabilidad con que las familias asumieron su vida en el barrio y las propias exigencias que se autoimpusieron para lograr el ahorro necesario.

"Fueron ellas mismas las que se comprometieron a tener sus ahorros a enero de este año. Eso implicó muchos sacrificio para todas ellas porque de no responder, arriesgaban la posibilidad de salir del comité y del barrio. Afortunadamente hoy tenemos toda la documentación en orden y esperamos que en la reunión del próximo jueves con el Serviu ver cuantas familias vamos a poder postular al subsidio", dijo.

El Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) ha apoyado la gestión y organización de la demanda de las familias que viven en el incipiente barrio. Según los datos proporcionados por la institución, a la fecha existen 110 viviendas construidas en el barrio, de las cuales hay 103 ocupadas y sus habitantes están hábiles o pueden acceder a una vivienda.

No obstante, el esfuerzo económico que implicó lograr el ahorro necesario no se traduce en la obtención de una vivienda, al menos, en el corto plazo.

Plazos

Julio Santander, seremi de Vivienda y Urbanismo de la región indica: "Es muy común que las personas confundan tener los recursos en la libreta de ahorro, con la obtención de una vivienda rápidamente. Lamentablemente son cosas distintas. Ambas no están necesariamente relacionadas porque depende de la cantidad de proyectos en ejecución, del presupuesto que se cuenta, de la disposición de suelos, entre otros factores".

Para las familias del Barrio Transitorio, la obtención de una vivienda definitiva, entonces, se transforma en un anhelo cuyo horizonte no se proyecta inferior a tres años desde el momento de la postulación.

"Por la experiencia que tengo de anteriores comités, creo que un plazo razonable para nosotros es de tres años, por lo mínimo. Claro que el resultado va a depender de la colaboración de las autoridades de turno y de la gestión que podamos hacer ante el Serviu", afirma Susana Véliz.

Con ello, los casi 500 habitantes del barrio -cerca de 200 niños- deberán esperar hasta el 2021 por una solución, en un escenario que se complejiza si se toma en cuenta que al 2018 el Minvu estimó en 35 los campamentos y cerca de 3.000 familias viviendo en ellos, solo en Antofagasta.

María, Fernández Velásquez,, jefa de hogar"

"Este campamento es muy organizado y hay cosas que cumplir. La convivencia es buena, todos nos conocemos, cuidamos y ayudamos. Desde que nos trasladaron tenemos que pagar el recibo de la luz y el agua, pero es lo correcto".

Elena, Martínez, Michea,, Jefa de hogar"

"Llevo 2 meses acá. Viví en el campamento Mujeres Unidas por 14 años pero tuve que salir porque estaba en área de riesgo. Allá en le campamento no pagábamos nada, acá sí, pero está bien porque así va a ser cuando tenga casa propia"."