Daniel Contreras Palma
Según los expertos en meteorología, para una zona como Antofagasta los parámetros normales de pluviosidad alcanzan una media de apenas 1.7 milímetros (mm) de lluvia en 12 meses.
Sin embargo, y de acuerdo a información recogida desde la Dirección Meteorológica de Chile, en los últimos cinco años (2014-2018) la ocurrencia de precipitaciones se han intensificado en la comuna, registrando en dicho periodo un total de 32 días con precipitaciones medibles. El mayor número en las últimas tres décadas.
En este lapso, 2015 fue el año en que la capital regional alcanzó la mayor cantidad de días con precipitaciones, 11.
Incluso, en marzo del mismo año, en un fenómeno climático que se extendió por dos días, cayeron 23,6 milímetros de lluvia sobre la ciudad. Mientras que el acumulado anual fue de 38,6 milímetros.
Estos datos sugieren que se están produciendo cada vez con mayor frecuencia eventos de precipitaciones que escapan a los parámetros normales en la zona. Es más, ayer en la comuna una fuerte llovizna se hizo sentir en varios sectores de la ciudad, sin dejar daños.
"Todos los años no serán iguales. Hay años que son más intensos en el tipo de precipitaciones que otros. Efectivamente en los últimos tres años tuvimos mayor frecuencia de precipitaciones. Sin embargo este año a la fecha han caído 0,4 milímetros, que fue lo que se registró en el evento de ayer", explicó la meteoróloga de turno del Centro Meteorológico Regional Norte de Antofagasta, Marcela Ferrari.
Nuevo escenario
Por décadas, entre 2010 y 2018 han precipitado en la ciudad 75,2 mm de agua, contra los 17,6 mm de los años 70, los 41,7 mm de los 80, los 49,8 mm de los 90 y los 6,9 mm que cayeron los primeros diez años de este siglo (2000-2009).
Frente a este escenario, el director regional de Onemi, Ricardo Munizaga, confirma que la región ha ido experimentando cambios importantes en materia de precipitaciones, lo que ha obligado a implementar varios modelos de protección civil con el objetivo de hacer frente a los diversos fenómenos climáticos.
"En el tema de precipitaciones fuimos la región piloto en la creación de diseños de protección civil. Estos modelos obedecieron en primera instancia a un sistema de mapa de multiamenazas, que después fue adoptado por otras comunas, el que aportaba una idea de lo que estaba ocurriendo con estas nuevas emergencias", manifestó el ingeniero con más de 12 años de experiencia en prevención de riesgos.
Munizaga complementa que esta mirada preventiva había partido hace 20 años con las obras de contención aluvial en quebradas, obras que se han ido ampliando en el tiempo gracias al trabajo del Ministerio de Obras Públicas.
Infraestructura
Según explicó el director de Onemi, otro cambio importante generado por la mayor ocurrencia de eventos climáticos, se ha producido en la infraestructura, ya sea pública o urbana.
Así, el MOP ha ido incorporando en sus diseños viales obras específicas para soportar precipitaciones más reiteradas y abundantes.
"Estas variables nosotros las pensamos trabajar desde diversas estrategias que están segmentadas por varios de los organismos que componen el Comité de Protección Civil y el Comité de Operaciones de Emergencia. La duda es cómo responder mejor a una precipitación, porque acá nuestra infraestructura y nuestra forma de vivir por muchos años estaba relacionada con una zona seca. Y eso nos obligó a pensar en nuevos diseños de fabricación para afrontar estos fenómenos climáticos", declaró.
Servicios básicos
Dentro de los diferentes planes que son activados por las autoridades en caso de emergencias derivadas de eventos climáticos, uno que ha tomado relevancia es el que está dirigido a las empresas de servicios y telecomunicaciones.
"Estas empresas trabajan en conjunto con nosotros para evitar tener cortes masivos de agua, electricidad o que las comunicaciones se pierdan. En este caso ellos tienen planes específicos, de manera que cuando nosotros emitimos alguna alerta o sabemos que se acerca un evento climático, inmediatamente refuerzan los puntos que son críticos de suministro. Se pueden dar cortes, obviamente, pero tenemos puntos estratégicos que deben seguir entregando suministro alternativo", aclaró el director regional de Onemi.
Otra necesidad es diseñar un sistema de aguas canalización de aguas lluvias en la ciudad, asunto donde el Mop ya cuenta con algunas propuestas de solución.
0,4 mm de lluvia se registraron ayer en la comuna de Antofagasta, siendo hasta ahora el único fenómeno climático del año.
42 mm de agua cayeron el 18 de julio de 1991, lo que luego derivó en un aluvión, dejando 92 víctimas fatales y 16 desaparecidos.
19,6 mm fue el último registro de precipitaciones importante ocurrido en la comuna de Antofagasta en junio de 2017.