Sergio Gaytán y el arte
Sergio Gaytán Marambio nos ha sorprendido con su partida, conversamos por última vez antes del lanzamiento de su libro "Con voz de Mujer". Si bien sabía de su hospitalización, esperaba que saldría adelante como ya lo había hecho antes, superando infartos, uno tras otros.
A Sergio lo conocía desde la U. del Norte, cuando era estudiante. Después fue la sombra de Andrés Sabella, luego se desprendió y reveló al escritor, antologista, crítico literario, miembro de la Academia de la Lengua, pero además un enamorado del Arte del dibujo, la Pintura , la Ilustración, Un seducido por nuestra corta tradición pictórica, de la plástica antofagastina que, con sus raíces pre hispánicas, retrocede a 11 o 12 mil años. Era amigo de los pintores y de los ilustradores de antaño y de hoy.
Es el Editor de mi obra inédita "Historia del Arte en la región de Antofagasta". Alguna vez le dije: "Sergio, si me voy antes tú la editas", pero Gaytán se me adelantó. Su elección como Editor fue providencial: me aportó datos y material fotográfico de la prensa de inicios del Siglo XX. Yo llegué el 60, Sergio tenía raíces en la vieja Antofagasta. La "Historia del Arte en la Región de Antofagasta" la conversamos en mi hogar, transitando cada uno de los doce capítulos en reuniones de los días jueves. El corazón del libro es el capítulo dedicado a Andrés Sabella, en su condición de protagonista, dibujante y cronista de la plástica Antofagastina.
Gaytán era un enamorado de la imagen hasta el punto que un texto corría el peligro de ser sepultado por el color y el dibujo. Había que frenarlo en su entusiasmo y hacíamos una selección: de 8 fotos de Cesar Soto Moraga acordábamos dejar 3. Son escasos los escritores que dialogan con el arte como lo hacía Gaytán, se había dedicado a estudiar música para escribir la Historia de la Música en Antofagasta, fue un sueño que no alcanzaría a cumplir.
Sergio fue un hombre universal, ninguna expresión artística le fue ajena, estoy seguro que, desde la dimensión y moradas del espíritu, velará porque la obra vea la luz.
Sergio ya descansa en la paz del Señor. Amén.
Waldo Valenzuela Maturana, pintor