De los 41 pasajeros que transportaba la máquina de la empresa Turbus que protagonizó el domingo el fatal accidente en la cuesta Paposo, 20 personas resultaron heridas, y una de ellas está en estado grave en el Hospital Regional de Antofagasta.

Se trata de una mujer, que ayer fue operada y se encuentra en la UCI de este recinto asistencial.

La mayoría fue atendida en el Hospital 21 de Mayo de Taltal, y según informó su director, Francisco Camilo Díaz, se recibieron 22 pacientes, los que inicialmente fueron categorizados según su estado.

En verde, los con lesiones leves. Amarillo, con lesiones de mayor consideración. Y en rojo, los más graves.

"Ingresaron en categoría verde 7 pacientes, en amarillo 14 y en rojo 2. Los rojos fueron trasladados a Antofagasta. Nos informaron que una ya salió de pabellón, está estable, pero su condición sigue siendo grave. La otra paciente, lamentablemente, falleció camino a Antofagasta y tuvo que retornar a Taltal", detalló.

Díaz informó que ayer a eso de las 19 horas, tenían a cuatro pacientes con alta médica, siete en el Hospital Regional y nueve asociados a mutualidades.

"De todos ellos, solo me quedan tres pacientes. Una que quedó hospitalizada aunque no está con heridas de gravedad y dos pacientes que están esperando la ambulancia de su mutualidad para ser trasladadas por accidente de trayecto al trabajo", precisó.

Heridos

Uno de los heridos es el administrador municipal de Taltal, Jorge Orellana, quien según informó ayer su hijo Cristóbal, se encuentra con fracturas en los hombros y costillas, pero estable, siendo trasladado en la tarde desde la Asociación Chilena de Seguridad de Antofagasta.

Cristóbal relató que su padre tomó el bus el domingo a las 20:15 horas para retornar a Taltal, donde trabaja desde el 2018. Antes que el vehículo volcara le alcanzó a comentar por teléfono al alcalde de Taltal, Sergio Orellana, que había olor a balatas quemadas.

"Él le había contado antes que ocurriera el accidente al alcalde que sentía olor a balatas al interior del bus", declaró.

Otro de los sobrevivientes es Michael Castro, quien producto del accidente perdió parte de su dentadura y tendrá que realizarse una operación.

En contacto con Mega, relató que minutos previos a la tragedia el bus tomó una velocidad tan alta, que hacía pensar que éste podría volcar.

"Es difícil contarlo y vivirlo. Cuando veníamos por la cuesta llegando a Paposo, el bus empezó a tambalearse para los lados, agarrando una curva a 100 o más de 100 (kilómetros por hora). Uno tenía un presentimiento que se podía volcar. Pero luego de una maniobra pasó en banda y se sintió sí el olor a balata", comentó.

Castro agregó que en ese momento subió el auxiliar del bus para avisar que se colocarán el cinturón.

"Pero ahí todos tuvimos una reacción de ver qué pasaba. Lamentablemente... bueno yo llegué por mis medios a la carretera, perdí parte de mi dentadura. Tengo que hacerme una operación a la mandíbula, parte del brazo también, pero gracias a Dios estoy aquí para contarla", agregó.