Investigadores descubren nuevas formas de vida en parque nacional
ESPECIES. Niebla costera hace surgir una biota de la cual no se tenía registro en el sector Pan de Azúcar. Científicos alemanes autores del hallazgo explican que información es útil para las futuras misiones a Marte.
En 2016, más de 30 investigadores y científicos -en su mayoría alemanes- llegaron hasta el Parque Nacional Pan de Azúcar, una de las cuatro zonas seleccionadas en el país, para comenzar la primera fase del proyecto EarthShape, una extensa y ambiciosa colaboración alemano-chilena que busca entender cómo la actividad de los organismos vivos afecta a la superficie de la Tierra y cómo la composición del suelo influye en la vida que se establece en la superficie.
Patrick Jung, investigador post doctoral de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Kaiserslautern de Alemania estuvo a cargo del proyecto de investigación "Estudios geoecológicos y taxonómicos sobre líquenes y musgos de biocorteza", que indagó en las particulares formaciones geológicas presentes en Pan de Azúcar.
"Llegamos allí con nuestros autos y vimos estos patrones negruzcos y blanquecinos en el paisaje", comentó el botánico cuando recuerda su llegada al singular paraje de Pan de Azúcar, ubicado en las regiones de Atacama y Antofagasta.
El terreno, sin embargo, no le resultaba desconocido. Ya antes había estado estudiando la presencia de líquenes en el sitio "Las Lomitas", anexo a ese parque nacional.
Estudios
El botánico alemán se especializa en la investigación de las cortezas biológicas del suelo (BSC por sus siglas en inglés) presentes en hábitats extremos como la Antártida, el Ártico o el Desierto de Atacama.
"Líquenes, algas y biocortezas aparecen en lugares áridos y Pan de Azúcar tiene la gran ventaja que la niebla estimula el desarrollo de estos organismos, ya que pueden ser reactivados mediante el agua de la niebla presente en el lugar. Pueden estar inactivas durante un período muy largo y sin nada de agua. Pero tan pronto hay niebla o rocío, de nuevo vuelven a activarse", indica Jung.
La investigación, sin embargo, descubrió un conjunto de biota que resulta más resistente que cualquiera que se haya descrito en otros ambientes desérticos del planeta.
"Las biocortezas se conocen de las regiones áridas y desiertos de todo el mundo, pero por lo general están unidos a la arena o un sustrato específico. En Pan de Azúcar los organismos están creciendo en pequeñas piedras de 6 milímetros. Se pegan a estas rocas de manera que se forma una costra débil", precisa el investigador.
"Hemos podido demostrar que esta biocorteza necesita casi la mitad de la cantidad de agua para alcanzar la fotosíntesis óptima en comparación con otros desiertos. Esto significa que la corteza 'Grit' (que es el nombre de la biocorteza de Pan de Azúcar) está altamente adaptada hacia cantidades muy bajas de agua proporcionada por la niebla y el rocío, y también está adaptada para el régimen de temperatura local", sostiene Jung.
Al igual que la investigación de astrobiólogos de todo el mundo, y de científicos norteamericanos que prueban vehículos y tecnología para misiones a Marte, Jung afirma que los hallazgos evidenciados en Pan de Azúcar ayudarían una probable colonización marciana
"Nuestro estudio indica que los organismos que viven en Pan de Azúcar podrían ser adecuados para la colonización de Marte, ya que necesitan muy poca agua. Otro dato interesante es que los organismos no sólo están creciendo agregado a las pequeñas piedras, sino también crecen dentro de las piedras. Grandes partes de Atacama se creen sin vida y ahora hemos podido demostrar que hay una gran cantidad de vida", precisa Jung.
Conaf
El 30 de enero de 2016 los científicos e ideólogos líderes del proyecto EarthShape, el geoquímico Friedhelm von Blanckenburg y el geólogo Todd Ehlers, visitaron dos sitios propuestos por los guardaparques por Conaf para el desarrollo de la investigación.
El conocimiento del terreno de Conaf y la experiencia científica de los investigadores, resultó clave para el desarrollo de una investigación que contribuye a la protección y valoración del parque nacional.
Desde esa fecha en adelante, científicos alemanes y chilenos realizaron otras dos visitas a Pan de Azúcar.
El 11 de marzo de 2016, el grupo de estudiantes del área de estudio -encabezada por Jung- llegó hasta el lugar y el 14 de marzo de 2019 pasado, retornaron, cuando se realizó el lanzamiento de la segunda fase de la iniciativa que se extenderá hasta el año 2022.
"Siempre ha existido una colaboración mutua entre el equipo que dirige el estudio, investigadores y guardaparques", señaló Boris Burgos, director (s) de Conaf Atacama.
"Nos mantenemos en permanente contacto y ha sido una experiencia grata y enriquecedora de colaboración. Resulta muy reconfortante ver cómo se concretan las publicaciones, cómo trabajan los equipos en terreno, y aprovechar de aprender de lo que ellos aprenden del parque", manifestó el directivo.
Parte de la investigación permitió además realizar un documental que resume los objetivos del proyecto que se desarrolla en otras tres áreas protegidas de Conaf: la Reserva Santa Gracia en la región de Coquimbo, el Parque Nacional La Campana en Valparaíso y el Parque Nahuelbuta en La Araucanía.
Además, los investigadores realizaron presentaciones a los guardaparques que les permitieron conocer parte de los resultados de las investigaciones que estudiaron el efecto del clima en las tasas de descomposición de las plantas, y también, el estudio de Jung en líquenes y biocostras del desierto costero.
La Conaf, como administradora de las áreas silvestres protegidas del Estado, busca promover la investigación científica y la conservación. Y en el caso del estudio de Jung, permiten poner en valor recursos naturales que gracias a la investigación científica resultan visibles para la educación y las ciencias aplicadas.
"Este proyecto viene a confirmar un nuevo paradigma, hay que comenzar a considerar aquellos elementos bióticos que quizás no sean fáciles de percibir en el medio, pero que están presentes como eslabones importantes del ecosistema. Este importante hallazgo viene a demostrar la riqueza biológica del desierto de Atacama, contenido en esos oasis de niebla que existen a lo largo del farellón costero, y que posibilitan la microvida en estos ambientes tan extremos y de singulares condiciones ambientales", afirmó Jorge Carabantes, jefe de Áreas Protegidas de la corporación.
IMÁGENES DEL ESTUDIO EN PAN DE AZÚCAR
90 científicos alemanes de distintas disciplinas forman parte de la iniciativa EarthShape que solo en la primera fase (entre 2016-2019) desarrollaron 16 proyectos.
4 sitios fueron seleccionados para el estudio, en razón de su biodiversidad: Parque Pan de Azúcar, Reserva Nacional Santa Gracia, Parque La Campana y Reserva de Nahuelbuta.
6 años de investigación EarthShape es un programa de investigación que fue declarado como prioritario y que está financiado por la German Science Foundation.