Inversión minera se estanca en 2019 y es una de las más bajas de la década
ECONOMÍA. Monto de los proyectos nuevos ingresados a evaluación ambiental superó levemente los US$1.300 millones.
Estancada se mantuvo la inversión minera ingresada al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (Seia) en la región durante el 2019. Si bien ésta alcanzó nominalmente los US$2.315 millones, más de la mitad corresponde a actualizaciones de proyectos ya aprobados, por lo que no representan recursos frescos para desarrollar nuevas iniciativas en la zona.
De acuerdo a los datos disponibles en la web del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), durante el año pasado ingresaron al sistema 17 proyectos mineros que consideran una inversión total de US$2.315 millones, cifra considerablemente inferior al promedio de la década que alcanzó los US$3.574 millones anuales.
Y si el dato nominal no resulta auspicioso, el análisis más riguroso revela un escenario aun más deprimido. Los tres principales proyectos de inversión corresponden a actualizaciones de iniciativas que ya cuentan con Resolución de Calificación Ambiental (RCA) y no implican nuevos recursos.
Se trata de las actualizaciones de Radomiro Tomic (Codelco, US$882 millones), Construcción diferida del depósito de relaves de Spence (Minera Spence, US$444 millones) y Manejo de ripios de la misma compañía (US$160 millones).
Esta última iniciativa además está duplicada en el sistema, por cuanto fue desistida en su primer ingreso.
Con esas consideraciones, la inversión minera fresca ingresada al Seia para la región supera levemente los US$1.300 millones, muy cercana a la alcanzada en 2018, cuando llegara a su nivel más bajo en los últimos 12 años.
Incertidumbre
Las cifras no parecen alentadoras, aunque durante el súperciclo se comenzaron a ejecutar una serie de proyectos de envergadura que aseguran una producción cuprífera importante por un largo tiempo.
No obstante esa base productiva asegurada, la prioridad del actual gobierno al momento de asumir fue dar fast track a las necesarias iniciativas de reposición que se mantienen -aunque en etapas tempranas-en carpeta, para lo cual creó la Oficina de Grandes Proyectos Sustentables (GPS), dependiente del Ministerio de Economía.
Los resultados de su gestión -sin embargo- estarán condicionados por la evolución del clima comercial a nivel global y el escenario interno.
"Ad portas del inicio de un proceso constituyente, que eventualmente podría extenderse por casi dos años, es importante despejar las incertidumbres e interrogantes que abre una tarea de esta naturaleza", partió advirtiendo el gerente de Estudios de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Álvaro Merino.
Y agregó que "si bien es relevante el comportamiento de la economía mundial, en el ámbito interno es fundamental tener claridad respecto al camino que seguirá el país para dar a los inversionistas una señal potente. No cabe duda que el debate constitucional que se inicia con el llamado a plebiscito y todo el proceso consiguiente, generará incertidumbre y pondrá una dosis de cautela en los inversionistas, hasta que no se despeje".
Aporte
Merino recordó que en momentos de incertidumbre los inversionistas actúan más cautelosos, por lo cual estima que -a mediano plazo y mientras no se despeje la incertidumbre respecto de las futuras reglas del juego que guiarán el accionar de la minería- disminuya o simplemente se detenga el ritmo de inversión.
"No obstante, considerando el importante aporte que la minería realiza al país, esperamos que en la elaboración de una eventual nueva constitución se mantendrán aquellos preceptos constitucionales que han contribuido en las últimas tres décadas a expandir y desarrollar la principal actividad productiva de Chile. Lo más nefasto sería dispararnos a los pies y terminar liquidando la actividad económica más importante del país", dijo.
Proyección
Respecto de las proyecciones, la GPS registra una carpeta de inversiones -con distintas etapas de avance- para el periodo 2019-2023, por un monto de US$31.000 millones, de los cuales el 77% corresponde al sector privado y el 23% a Codelco.
"Esta es una buena noticia para nuestro país, especialmente considerando el significativo aporte que la minería realiza al desarrollo económico y social de Chile", sostuvo Merino.
El 75% de esa inversión se concentra en las regiones de Tarapacá (US$7.800 millones), Antofagasta (US$9.700 millones) y Atacama (US$5.700 millones).
Esos proyectos -en su etapa de construcción- generarán unos 52 mil empleos y otros 34 mil en su operación.
Asimismo, el último informe de Cochilco estimó para el periodo 2019-2028 un monto de inversión por US$72.500 millones, considerando 44 proyectos, de los cuales el 91% corresponde a cobre y el 9% a otros minerales como oro, hierro y litio. Antofagasta capta el 34% de esa inversión total.
"Esperamos que en la elaboración de una nueva constitución se mantendrán aquellos preceptos que han contribuido a expandir y desarrollar la principal actividad productiva de Chile"
Álvaro Merino, gerente de estudios Sonami