Juan López, reivindicación (tres)
El expediente de "LAS HUANERAS...", vuelve a circular 149 años después, gracias al empuje de los mejilloninos Wilfredo Santoro y Florentino Novoa, el aporte de la empresa privada GNL-Mejillones y gestión municipal, mediante su alcalde Marcelino Carvajal y el Consejo Municipal de Cultura,.
El tema es el acto indemnizatorio por la caducidad de la extracción del guano rojo en el morro de Mejillones, basado en los apuntes de puño y letra de López y que fueron base para la reclamación de sus abogados y que ellos deciden, además, comunicar a la opinión pública toda, dado los difíciles momentos económicos que atraviesan y por instalar en el inconsciente colectivo la injusticia e irregularidades que vivían. Es decir, se trata (en lo específico) de un ensayo, de una propuesta, de una argumentación que cimenta una fundamentada reclamación. Es de suyo un libro importante, capital, y que deberá ser conocido y reconocido a nivel no sólo nacional, sino internacional, como otros editados y donde cada región o espacio geográfico lo tiene y mantiene cual dios tutelar o se menta entre los clásicos de su propio patrimonio inmaterial.
Se debe hermanar además a "LAS HUANERAS..." con otro libro capital de la zona norte, "Historia de Copiapó", (1874) y el que nos ocupa vuelve a ganar, es anterior en once años. Su autor, Carlos María Sayago, vinculado también con Antofagasta, en tanto en 1899 ocupó el cargo de Intendente de la Provincia.
Pero hay algo más, pues entre las muchas de sus páginas ensayísticas se advierte la presencia de toda una incipiente narrativa nortina y sin más nos introduce haciendo uso del consabido tópico de la falsa modestia: Pero no entra en nuestros propósitos el trazar su historia. Pero sí lo hace y lo consigue, pues cómo explicar frases como ésta:
"Reseña breve, sumaria i descarnada del derrotero que siguieron los que, desafiando las rompientes del mar por el espacio de algunas leguas, i atravezando temerariamente un desierto espantoso. Y, por otro lado, el que expresen: "Los que estas líneas escriben no esperan sentar plaza de exagerados..."
Sergio Gaytán