Constanza Caldera Pfeiffer

"Me subí al colectivo. Y cada vez que un pasajero lo hacía parar, el conductor decía que no pasaba por esos lugares, en circunstancias que el recorrido sí los consideraba. De hecho, eran paradas que estaban antes que mi destino. Fue ahí cuando comenzó mi desesperación".

Así recuerda la antofagastina Mariana Allende, de 26 años, su experiencia en un colectivo. Esta joven agrega que después de negarse a llevar a varios pasajeros, el conductor aseguró que no le quedaba bencina. Fue en ese momento que decidió descender del auto. Esto, porque la justificación le pareció poco creíble y por miedo a que algo le ocurriera.

Se trata de un temor que la acompaña hace varios años. Para esta joven profesional, tomar sola un colectivo, micro o un vehículo de las aplicaciones de transporte, es una verdadera "pesadilla", pues se siente muy insegura.

Temor

El temor al momento de usar algunos medios de transporte es un sentimiento que carga la mayoría de las mujeres. Muchas tienen que cruzar gran parte de la ciudad junto a un desconocido para llegar a su trabajo o regresar a casa luego de una fiesta.

En estas situaciones, el miedo siempre está latente. Algunas jóvenes evitan viajar solas o implementan ciertas medidas de resguardo. Mariana, por ejemplo, lleva consigo un dispositivo de gas pimienta en caso de emergencia. Otras toman disimuladamente fotos del conductor y lo envían a alguien de confianza y también están quienes simulan conversaciones con un familiar, de preferencia un supuesto detective o carabinero.

Caso

La semana pasada el caso de una joven que denunció un intento de secuestro mientras viajaba en un Uber puso el tema nuevamente en el tapete.

La hermana de la joven relató la situación a través de las redes sociales. Allí contó que ella había pedido un viaje desde calle Bauxita hasta Bonilla, cerca de las 3:30 de la madrugada del jueves pasado.

Al estar muy cerca del destino, el chofer habría dado una vuelta en U y acelerado fuertemente. La joven le pidió detenerse, pero el conductor no hizo caso. Entonces decidió lanzarse del vehículo en movimiento, resultando con varias lesiones.

La antofagastina Carolina Espinoza, de 32 años, asegura sentir mucho miedo de tomar Uber sola a cualquier hora.

"Normalmente me siento atrás y envío el trayecto en tiempo real a mi pareja. Pero si puedo evitar tomar Uber, lo hago porque me da pánico que me lleven para otro lado", indicó.

Espinoza utiliza colectivo y micro, pero lo hace en horas que circula harta gente y se asegura que no vayan vacíos.

Andrea Gómez, de 33 años, no toma muy seguido Uber ni colectivo, pero cuando lo hace siempre envía su ubicación en tiempo real.

"Como vivo lejos (sector norte de Antofagasta) siempre soy la última en bajar, entonces más miedo me da. Me ha pasado que a veces el colectivo toma caminos alternativos o pasa a la garita y ahí me empieza la histeria. Por eso, evito andar sola, sobre todo después de las 20 horas", comentó.

TRANSPORTa MUJERES

Para evitar riesgos, muchas mujeres han optado por no trasladarse en vehículos conducidos por hombres.

Verónica Matamoros, realiza el servicio de transporte de mujeres. Un rubro al cual llegó el año pasado cuando estaba sin trabajo. Esta conductora comenta que a los pocos días se percató del temor que existe entre las mujeres de viajar con hombres. Esto la llevó a comenzar a ofrecer su servicio. A seis meses de iniciarse en este rubro, ya tiene un número fijo de clientas.

"A la semana me di cuenta que todas las mujeres que tomaba con la aplicación al verme me decían: ¡Uy eres mujer, qué felicidad! Era un verdadero alivio para ellas, un paraíso. Además, yo trabajo de noche, entonces para todas las jóvenes que tomaba, era lo máximo ver que era mujer", dijo.

Desde ahí que surgió la idea de promocionar su servicio solo para mujeres. Y le ha ido bastante bien. "De hecho ya ni siquiera a veces trabajo con las aplicaciones, sino que hago los viajes de noche solamente por los pedidos. Voy harto al aeropuerto, porque al ser un tramo largo y solitario", declaró.

Matamoros relata que muchas de las pasajeras que transporta han tenido problemas con conductores varones. Por este motivo, solo viajan con mujeres.

"Hay varias que me han dicho que han tenido problemas con los hombres que conducen bajo el sistema de aplicaciones (de celulares). Al ver que son hombres se sienten inseguras", manifestó.

"Como vivo lejos (sector norte de Antofagasta), siempre soy la última en bajar. Entonces, más miedo me da".

Andrea Gómez,, evita viajar sola

"A la semana me di cuenta que todas las mujeres que tomaba al verme me decían: ¡Uy eres mujer, que felicidad! Era un alivio".

Verónica Matamoros,

"transporta a mujeres "Cada vez que un pasajero lo paraba, el conductor decía que no pasaba por esos lugares, siendo que sí. Ahí me desesperé".

Mariana Allende,

"le da miedo viajar sola "Normalmente me siento atrás y envío el trayecto en tiempo real a mi pareja. Pero si puedo evitar tomar Uber, lo hago".

Carolina Gómez,, evita viajar sola