Cristian Castro Orozco

Diversas reacciones generó el inédito fallo de la Corte de Apelaciones de Talca el cual, acogiendo un recurso de protección, dirimió que la AFP Provida deberá restituir la totalidad de los fondos previsionales a uno de sus afiliados en un plazo no superior a 30 días.

El fallo dictaminó que "frente a la existencia de dos derechos que parecen contradecirse -seguridad social y propiedad-, debe tenerse en consideración que el primero aparece como un derecho futuro y eventual (...) En tanto el segundo, se trata de un ejercicio inmediato y que guarda relación directa con su calidad y condiciones de vida del recurrente".

El suceso trajo a colación el caso de la antofagastina María Ojeda, profesora jubilada que al igual que el afiliado de Talca, interpuso un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Antofagasta en julio pasado para que la AFP Cuprum le devolviese sus ahorros previsionales.

La Corte de Apelaciones de Antofagasta envió un requerimiento de inaplicabilidad al Tribunal Constitucional (TC) sentando el primer precedente en este tipo de litigios. Finalmente el TC rechazó el requerimiento en noviembre. El caso ahora lo debe revisar nuevamente la Corte de la ciudad.

Esperanzas

La profesora cuenta que durante estos últimos meses ha estado esperando respuesta de la Corte con respecto a su caso, pero celebra que en el fallo de Talca no se recurriera a un pronunciamiento del TC.

"Es una muy buena noticia porque no se llegó a requerir la opinión del Tribunal Constitucional, situación que no se dio en mi caso. Eso quiere decir que al ignorar al TC se le está reconociendo el derecho a nuestra propiedad, o sea que nuestros fondos previsionales nos pertenecen, por lo que nos da esperanza de que pueda existir un cambio de criterio en las cortes".

¿Qué hará si en su caso la resolución de la Corte Suprema (donde finalmente se revisarán estos recursos) no es favorable?

-En ese caso, iremos a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Previo a conocer el fallo de la Corte de Talca, ¿tenían esperanza de un fallo a su favor?

-Bueno, este fallo nos abre una esperanza para muchos casos de demandantes, porque muchas personas pensaron que podrían hacerlo y bueno, a este señor de Talca le fue favorable y esperamos que le vaya muy bien en la Corte Suprema porque si le va bien a él, nos irá bien a todos.

De todas maneras lo más importante es que ahí uno percibe cómo los jueces interpretan el derecho a la propiedad, lo que estiman como un derecho, cosa que no es reconocido hoy por nuestro Tribunal Constitucional. Entonces de alguna manera hoy en día hay una mirada distinta en Chile y creo que cambiará la cosa.

Esperamos que sea favorable al menos para las personas que piden una parte de sus fondos, porque inclusive hubo una intencionalidad del Presidente Piñera de hacerlo con personas con extrema enfermedad.

Manifestaciones

El caso de esta profesora antofagastina hizo eco en la contingencia mediática del país en septiembre pasado cuando se da a conocer que la Corte de Apelaciones envió el requerimiento de inaplicabilidad TC, dando énfasis a la discusión de si es que las AFPs se ajustaban a la Constitución al retener los ahorros de sus afiliados y entregarlo en sumas mensuales.

Luego, el 15 de octubre el TC declara admisible el recurso de la antofagastina. Tres días después estallan las manifestaciones sociales en las cuales las mejoras a la jubilación aparecen como una de las principales demandas.

No obstante a lo anterior, el TC desestima el requerimiento el 18 de diciembre.

Su caso fue decretado admisible por el TC el 15 de octubre del año pasado, es decir tres días antes del llamado estallido social, cuyas demandas en un principio fueron educación, igualdad, salud y mejores pensiones. ¿Cree que esto haya influido en la decisión que se tomó con respecto al afiliado en Talca?

-Yo creo que sí, de todas maneras porque hemos visto en los carteles en las calles que una de las mayores demandas de las personas es que no existan más las AFP.

Esto ha influido en la sensibilidad social de los jueces. Nosotros no somos jubilados sino pensionados, porque la palabra jubilado viene de júbilo y la verdad es que es muy triste. Esta es la edad en la que estamos enfermos, cansaditos.

Ese es el problema que tenemos más de fondo, al menos las personas mayores de 60 años que hoy de alguna manera viven de forma muy paupérrima sus pensiones.

¿Cree que la Corte Suprema falle a favor de sus recursos?

-Yo creo que podría ser favorable porque de alguna manera ha habido varios intentos de llegar a la Corte Suprema para que se pronuncie respecto a nuestro derecho a la propiedad. Hoy se puede dar esa posibilidad que se falle a nuestro favor.

"De todas maneras lo más importante es que ahí uno percibe cómo los jueces interpretan el derecho a la propiedad, lo que estiman como un derecho, cosa que no es reconocido hoy por nuestro Tribunal Constitucional".