Cuarentena
No creo que después de esto salgan mejores personas, pero deberíamos hacer al menos el esfuerzo de mejorar, de mirarnos y ver qué cosas debemos corregir. No es inútil.
Paola Castillo
Incidentes
El día 27 de abril, se desarrolló una intensa jornada de incidentes y enfrentamientos en Antofagasta, en la cual hordas de vándalos hicieron de las suyas en la Cachimba de Agua, o lo que queda de esta, camiones municipales obligados a botar la basura en la calzada para ser utilizada como barricadas, ataques a Carabineros, quema de un vehículo y de una incipiente empresa, caos total y delincuencia desatada. Luego en la edición del día 29 de abril los políticos de la región dan su versión de los hechos, destacando la más acertada la entregada por el Senador Pedro Araya quien señala " Lo que vimos no constituye en ningún caso una protesta, son hechos delictuales, luego da su opinión la diputada RD. Catalina Pérez que (elegida con un 3.76% del electorado) quien manifiesta que "Las personas están desesperadas, porque ademas del riesgo de contagio no saben si van a llegar a fin de mes".
Sra. Diputada yo estuve in situ, deje mi vehículo en un lugar seguro y me dirigí al lugar de los hechos, dudo que aquellos que desplegando una condición física envidiable, al verlos correr y subir cerros, no tengan los recursos para llegar a fin de mes, luego trate de conversar con algunos manifestantes que vestían sendos buzos blancos, mascaras y hasta radios portátiles y fue como las entrevistas a Diego Maradona, por cierto ni siquiera podían modular e hilvanar frases, estaban drogados a y todos eran jóvenes que no pasaban los 25 años, entonces el Senador Araya, en parte, tiene toda la razón eran narco delincuentes.
Al ver esta situación me recordé de la autoridad, responsable de mantener el orden publico conocido por su celebre frase de "que no panda el cunico" y le solicitaría tome su chipote chillón, y disponga lo necesario para evitar este tipo de acciones, sino, "Quién podrá defendernos".
Roberto Espinosa Fabres
Pastelero...
El Presidente debería dejar que los geógrafos hablen de mesetas.
José Luis Hernández Vidal
Salud colectiva
En su última columna, Thomas Friedman analizó la estrategia sueca (país con 10 millones de habitantes) para combatir el coronavirus. En breve, se trata de lograr la inmunidad colectiva maximizando la exposición de la población menos vulnerable y de menor riesgo (menores de 65 años y sin enfermedades metabólicas). Esto, bajo el argumento de que para la mayoría de estos segmentos, el COVID-19 no será más que un resfriado pesado o incluso puede presentarse asintomáticamente. Hasta ahora, el país nórdico no ha enfrentado un colapso hospitalario ni el alarmante aumento del desempleo. La prudencia, naturalmente, obliga a seguir observando al paciente sueco.
En Chile, una estrategia así sería una hecatombe colectiva. Nuestra población posee un elevado número de personas con diabetes, hipertensión, obesidad y variadas -si es que no múltiples- adicciones, todos factores de riesgo del COVID-19 y vehículo para el colapso hospitalario. Que triste desarrollo el nuestro.
Ser saludable -base fundamental de la calidad de vida- es el mejor seguro de salud que pueda contratarse para enfrentar las pandemias del futuro. Si no se entiende ahora, no se entenderá nunca.
Camilo Barría-Rodríguez
La censura cuesta caro
Cada 3 de mayo se celebran los principios de la libertad de prensa. Se recuerda la importancia de defender la independencia del periodismo y se honra la labor de aquellos que perdieron la vida en el ejercicio de su profesión. Este año, y en el contexto de la pandemia, la fecha cobra un valor aún más importante.
En China, país donde se originó el virus, las autoridades llevan años sometiendo a estricta censura todos los medios y publicaciones. Llama la atención entonces que algunos miren el autoritarismo chino como un modelo eficiente para contener la pandemia. Se ignora que esa falta de libertad y fiscalización al Estado fue la que permitió que el gobierno ocultara información durante meses, limitando los márgenes de acción de los demás países para reaccionar.
Hoy más que nunca debemos cuidar y valorar nuestra democracia liberal con las garantías de transparencia que esta nos entrega. Caer en tentaciones autoritarias para combatir los problemas ignora la responsabilidad inicial de estos en generarlos.
Bárbara Haas