"Savia Nueva"
Neftalí Fructuoso de la Fuente y Agrella publicó en 1921, un pequeño folleto de "Poemas Líricos Revolucionarios", bajo el nombre de "Savia Nueva".
Se puede hablar de éstos como de algo sin ubicación en biblioteca alguna. En él se leía que "Fue impreso por el mismo autor, en la aldea de Mejillones", (acaso haya sido el único librito de poesía publicado allí); iba dedicado a las Federaciones de Estudiantes de Magallanes.
Se componía de 10 poemas, (nueve en verso y uno en prosa), balbuceos de canción y de protesta. Había un poema fechado en 1918; los otros correspondían a 1920-21. Para nuestro afán interesa señalar que el último poema de este folleto estaba dedicado a José Domingo Gómez Rojas, (escrito en Valparaíso el 30 de septiembre de 1920).
A José Domingo Gómez Rojas, el mártir. "El Hermano partió, joven y altivo, y sin cristalizar aún su oración, poseyendo el dolor definitivo de no haber hecho mármol su emoción.
Su vida trunca nos solloza al lado, mientras permanecemos en la absorta contemplación del ideal truncado del ansia enorme y de la vida corta.
En los confines de nosotros mismos se constela- el dolor como una estrella; flores de luz germinan los abismos y hasta la misma Muerte se hace bella.
El Hermano partió por la mañana… Vistió su toga de serenidad, y la vista clavada hacia la arcana lejanía, dejó nuestra heredad." (Fragmento).
"Savia Nueva" traía dedicatorias y sueños de rodillas ante la vida nueva. Recordamos que una de las composiciones era dedicada al antiguo luchador nortino José S. Córdova, que fuera, en su hora, festejado poeta de la izquierda de entonces.
Agrella colocó al pie de estos poemas: "Primera Serie", con lo cual indicó trabajo por venir… que la vida se encargó de anular, aunque no de estrangular, pues él ha continuado, con innúmeros contratiempos su faena.
N. de la R.: De la reciente edición de "El astrónomo loco", de Neftalí Agrella, donde Sergio Gaytán M., rescata lo escrito por Sabella en "Rebeldías Líricas" de Gómez Rojas y que el tiempo desleyó como "Savia Roja".
Andrés Sabella, 1940