"Eduquen a sus hijos como era antes"
ANTOFAGASTINIDAD. Luis Pérez Argote, emprendedor.
La ciudad de Córdoba, Argentina rondaba las 400 mil personas en 1951 y ya se consolidaba como un enorme polo industrial para ese país. Allí nació Luis Pérez Argote, empresario radial (Romina) e inmobiliario nortino quien llegó apenas al año a nuestra región… Y desde entonces no se ha movido.
Don Luis es hijo un chileno ferroviario, conductor de tren, quien -según recuerda- lo despidieron por ser eficiente, "aunque suene ridículo".
Su madre era una inmigrante de Cochabamba, Bolivia, dueña de casa y fue a quien se le ocurrió poner un almacén al quedar su padre sin empleo.
Entre sus hermanos hay comerciantes y entre sus hijos hay profesionales, emprendedores, mientras los más pequeños están terminando la universidad.
¿Qué recuerda de su infancia?
-Lindos recuerdos, vivíamos en Porra 636 (Antofagasta) muy cerca de la estación. Era una alegría y un gran acontecer la llegada del tren, la máquina a vapor. La gente era muy feliz a pesar de que Antofagasta era una ciudad chica, donde se destacaba como empresa local la CCU donde producían la Bilz y Pap y la cerveza Pilsener. También estaba el puerto y la llegada de los vapores. Originaba mucho trabajo para la familia portuaria, que eran los mejores sueldos.
Además el tío Nano nos hacía los volantines y nos llevaba a jugar pasada la línea del tren, donde actualmente está la plaza Matta. Porque Antofagasta llegaba hasta esa parte. Sobre la línea del tren habían sólo cerros.
En esos años el verano comenzaba en noviembre y terminaba en marzo, las familias salían a la puerta de sus casas con bancas porque hacía mucho calor y se refrescaban con limonadas o ulpo que era una bebida muy popular, eran tiempos de mucha vecindad. Todos los niños del barrio nos juntábamos a jugar a la pelota que era de trapo y a las bolitas de barros o de vidrio, momentos muy felices. Además se consumía mucho pescado y marisco, porque había en abundancia y era barato.
¿Qué aprendió de sus padres?
-Aprendí a ser responsable, a no mentir, ser honrado, a no abusar de los más débiles, a no ser egoísta, y principalmente, en la medida que se pueda, ayudar a los más necesitados. La radio me ha otorgado la manera de ayudar a los campamentos haciendo campañas de mucha ayuda social. Eso me da tranquilidad.
En su juventud fue almacenero. ¿Qué recuerda de aquellos años?
- Gran parte de la juventud ayudé en el almacén a papá y mamá, también lo hicieron mis hermanos menores y sin darnos cuenta, cuando ingresamos a la universidad a los años tuvimos que dejarla, ya que mamá formó un minimarket en calle Maipú y el movimiento de abarrote, ya no era comprar 5 kilos de azúcar, sino que mil sacos de azúcar, 50 tambores de aceite. Eso demandó tiempo y trabajo. Al principio sentimos pena por no terminar la carrera, pero después el negocio nos dio mucha satisfacciones, porque pudimos vivir mejor, viajar al extranjero. De varios giros comerciales que hemos hecho, creo que el mejor y más feliz fue el supermercado de Maipú porque el día se pasaba volando, rellenando góndolas, vendiendo.
¿Cómo llegó a la radio y que significa para usted este medio?
-Tenía en la calle Ossa una venta de ropa de guagua y contraté los servicios de publicidad al señor Jorge Órdenes, luego él se fue de vacaciones y por su olvido se cortó la publicidad... En ese momento me acordé que mi madre me dijo que nos hacía falta construir un hotel sobre el supermercado y una radio AM. En ese momento despertó la idea de hacerlo realidad. Me demoré tres años en poder concretarlo, ya que aquí en la ciudad nadie sabía nada como poder postular a una frecuencia FM, tuve que ir a Santiago para contratar un técnico que hiciera el proyecto.
La radio Romina se inició con la llegada del señor Luis Torres Juárez quien fue el primer director que formó la emisora y le dio la línea musical, que trabajaba de lunes a sábado. Para mí la radio significa una gran responsabilidad social y a la vez un agradecimiento porque lo sensibiliza con las necesidades, los grandes problemas que tenemos como barrio, ciudad, provincia y como país.
¿Qué canción o canciones son las que más lo identifican?
-Todas las canciones de la época de oro, de los años 50, 60 y 70 de la música romántica, tropical y el folclor latinoamericano.
En días tan complejos, ¿qué consejo se permitiría a darle a la gente?
-Les diría a los padres de familia que eduquen a sus hijos como era antes y le críen hábitos: que sean responsables, trabajadores, honrados y que le formen el hábito de la limpieza. Todo eso se les enseña en casa, y no en los colegios, nos falta humildad y ser felices con lo que tenemos, no ser consumistas. Y agradecer este lindo clima del Norte de Chile. Casi todos los días tenemos sol y días cálidos.