Canastas familiares I
¿Sabe Ud. que las canastas familiares a repartir están conformadas de acuerdo al aporte calórico?. Pero no consideran el indicador clave que es el aporte nutricional.
H. S.
Canastas familiares II
A caballo regalado, nunca se le miran los dientes.
Andrea González P.
Despedida
A la lamentable muerte de Sergio Marchant, otro viejo estandarte de la época dorada del deporte antofagastino, acaba de morir en Santiago, Manuel Figueroa Soljan, más conocido como Cochecho, por legiones de amigos , quienes tuvimos ocasión de entablar amistad con este personaje, de una desbordante simpatía y alegría, poco común en tiempos actuales.
Destacado deportista, especialmente en el fútbol, fue arquero de la selección amateur de la AFA y uno de los primeros en este puesto, de los primeros equipos de Antofagasta Portuario en su excursión para postular al fútbol profesional. También otros deportes como el wáter polo, básquetbol, conocieron su entusiasmo y amor.
Culminó su carrera como cultor del deporte, logrando la acreditación, como periodista deportivo, en diarios y emisoras de Antofagasta y Santiago, dejando recuerdos de su desbordante personalidad. Fue campeón indiscutible, en su faceta como ser humano. Dotado grandes aptitudes artística, tocaba piano, guitarra y cantaba, tanto en fiestas hogareñas, como en lugares encopetados, siempre derrochando la alegría y entusiasmo que siempre lo caracterizo. Cochecho, gran amigo, descansa en paz.
Sergio Petricio Perlik
Hambre
Sin duda uno de los resultados catastróficos de la pandemia tiene que ver con el empobrecimiento de diversos sectores sociales que previamente poseían un estatus vulnerable. Esta carestía se visualiza de diversas formas, quizás la más cruda es el hambre, que ha servido para levantar manifestaciones en algunas zonas del país. En imágenes se ha visto a personas reclamar por esta situación, lo que ha motivado diversas calificaciones en redes sociales, mofándose del estado nutricional, el cual de alguna manera contrastaría con la exigencia de alimentos y con la falta de estos.
Podemos ver en la última encuesta nacional de salud (ENS) 2016-2017, que la prevalencia de obesidad es significativamente mayor (43,2%) en aquellas personas con menos de 8 años de educación formal (con mayor probabilidad de encontrarse en sectores de menores ingresos) versus aquellas que poseen más de 8 o 12 años de educación. Este análisis puede hacerse también en otros indicadores de la ENS 2016-2017. En otras palabras, a peor condición socioeconómica, aumentan los hábitos poco saludables, asociado a una baja oferta y acceso de recursos de calidad para combatir esta situación. Por tanto, es algo obvio y nada gracioso que aquellos sectores más pobres, que ahora enfrentan escasez de alimentos, se observen con niveles mayores de exceso de peso, lo que solo es un reflejo más de inequidades en salud y de falta de contacto y análisis de la realidad.
Matías A. Jara Varas
Ejemplo mundial
Este período de incertidumbre nos ha permitido apreciar las distintas reacciones de las economías del mundo, para mitigar lo que más se pueda los efectos del COVID-19.
Independiente del resultado que se obtenga, el objetivo final de todas ellas es fomentar la construcción de triángulos virtuosos entre consumidores, Estado e inversionistas, dejando de lado los círculos de poca sinergia, que muy a menudo terminan en espirales sin retorno.
Un ejemplo claro de estos espirales se ha registrado en la industria de la energía, y particularmente en economías de países desarrollados, que basan su reactivación en fuentes de bajo apoyo gubernamental, y cuya obsolescencia es cosa de tiempo, como la energía nuclear.
Como ciudadano checo que visita Chile con frecuencia, puedo dar fe que este país está dando pasos correctos y decisivos en energía. Chile hoy es el cuarto país del mundo con mayor penetración de energía solar para satisfacer la demanda eléctrica, con un 8,5%. Doblemente meritorio, considerando lo tentadores que pueden ser combustibles como el petróleo o el gas, con precios inéditamente bajos.
Esto confirma que la industria chilena de energías limpias es extremadamente madura y apunta a generar un triángulo virtuoso, convirtiendo al país en un ejemplo mundial y digno de observar incluso por las economías más desarrolladas del planeta.
Zdenek Sobotka