Katherine Jofré S.

Una verdadera batalla contra el coronavirus, están dando entre pacientes y personal médico en la UCI del Hospital Carlos Cisternas. Si bien aún no existe un colapso, están con todas sus camas ocupadas. Estos profesionales, indicaron que es una verdadera película de terror, ya que ven personas recuperarse, pero también otros que están muriendo.

En los pasillos de este hospital no se siente lo mismo de antes, se observa al personal médico completamente equipado caminando de prisa, hacen traslados de pacientes todo el día entre todos los pisos y sin contar el sonido de las máquinas cuando indican que algo anda mal.

La denominada "Primera Línea", está viviendo lo que tanto temía, el coronavirus ya está avanzando y jamás imaginaron la gran cantidad de pacientes críticos que tienen actualmente.

"Pensábamos que esto iba a ocurrir solo en nuestras pesadillas. Existía la posibilidad pero como en una película de ciencia ficción. Hay muchas películas dedicadas a esto como Pandemia, Virus, películas de 1995 incluso. La ciencia ficción cobró realidad y es algo que nadie esperaba. No pensamos que nos iba a tocar tan fuerte, eso que aún no estamos en el peak de la enfermedad. Es como una película de terror", relata Mingo Fuentes, médico residente de la Unidad de Pacientes Críticos (UCI) del Hospital Carlos Cisternas.

Impotencia

El coronavirus llegó el 14 de marzo a la Provincia El Loa y ya en esta área han visto de todo, desde personas que se empiezan a recuperar, como otros que finalmente fallecen.

"Existe impotencia. Saber qué aún no existe una vacuna, todo está en experimentación. Y esto continúa, la pandemia avanza y vemos a diario como muere gente, gente que está cayendo en ventilación mecánica, luchando por su vida y esto va en progreso", indicó este médico, el cual pidió desde el área más crítica de esta unidad de salud, que la comunidad sea consciente y se quede en casa.

"Mantener el aislamiento social es vital, esto no se está contagiando solo por la vía respiratoria, también por los ojos, por lo tanto, tratar de protegerse al máximo y lo más importante, dejar de acudir a lugares donde hay gran aglomeración de personas", indicó Fuentes.

Son 1.200 trabajadores del Hospital de Calama, los que se están enfrentando a esta pandemia. Turnos donde ellos mismos han dicho se hace de todo y todo tiene un solo fin: buscar la mejoría de estos pacientes.

Cambios

El recinto ha cambiado considerablemente, hay prestaciones que no se están desarrollando y tuvieron que ser externalizadas por el bienestar de aquellas personas que aún no están contagiadas.

El desgaste es enorme, incluso duplicando esfuerzos para hacerle frente a esta enfermedad sin vacuna ni cura.

"La atención primaria nos está ayudando mucho, porque las urgencias leves las están viendo ellos, aumentando sus horarios en sus sapus. Porque nosotros estamos evocándonos al COVID-19 y a las patologías respiratorias de alta complejidad. Hoy nuestra urgencia respiratoria está con capacidad límite y requieren tener flujo de camas muchas veces, dentro del hospital y en ese contexto estamos abriendo una área de hospitalización transitoria. Todo esto está pensando en dar una buena atención", agregó el director (s) del centro médico, José Luis Pastor.

Un trabajo que mantiene a sus funcionarios desarrollando sus labores al máximo, incluso trasladando pacientes durante la noche. Una labor que es parte de esta contingencia mundial.

La UCI del Hospital Carlos Cisternas, sigue ocupada al máximo, más de 20 pacientes están luchando por mantenerse con vida, todos en ventilación mecánica.

Ayer la seremi de Salud, indicó que siguen sin camas para pacientes críticos, pero ya evaluaron alternativas.

"Camas UCI en el hospital público de Calama, cero, Camas UCI en el sector privado 5. Además, les comenté que podemos transformar camas. Hay 5 camas UTI en el sistema público que podemos hacer UCI y 5 camas UTI en el sistema privado que pueden convertirse en UCI", indicó la seremi de Salud, Rossana Díaz.

Por lo tanto, Calama tendría cupo para 15 personas por el momento, si es que la situación llega a complicarse más de la cuenta.

9 fallecidos en Calama. Ayer se registró una víctima más del coronavirus, un hombre de 78 años que permanecía internado.

Ahondar en los principales efectos físicos que genera la realización del teletrabajo, fue el tema central que abordó el kinesiólogo y diplomado en rehabilitación músculo esquelético, Jorge Alvear en una nueva entrevista de 'Mantente al día' sección de SoyAntofagasta y SoyCalama.

En esta oportunidad el experto detalló los principales errores que se cometen al realizar el trabajo en casa, los posibles problemas de postura y las recomendaciones para evitar lesiones.

Al respecto, el profesional indicó que "el estar mucho tiempo conectados a un computador implica una serie de problemas para la salud en general. Por ejemplo, visión borrosa, enrojecimiento de los ojos, aumento del parpadeo, también se podrían generar dolores de cuellos y la postura obviamente incide a nivel muscular".

En este sentido, Alvear explicó que una mala postura al momento de trabajar en casa puede generar problemas físicos en el corto y mediano plazo.

"Se pueden generar tendinopatías a nivel de hombros, de codo y de muñeca, usualmente la mayoría de los problemas lo primero que afecta es el codo y las muñecas, porque son los que se llevan la carga corporal al momento de estar sentados trabajando. A esto también se suma el alto porcentaje de personas que comienzan a sufrir de la espalda por esta misma razón. Sin embargo, es importante señalar que todos estos malestares se pueden acrecentar aún más cuando una tiene sedentarismo y mala alimentación".

El kinesiólogo agregó que "una mala alimentación, una vida sedentaria y además una mala postura para realizar el teletrabajo, es encontrar un cuerpo que no va a estar preparado para resistir ocho horas diarias en una misma posición".

Respecto a ello, el profesional recomendó realizar pausas activas durante el periodo de trabajo porque "logramos aumentar la oxigenación del cerebro, aumentamos el flujo sanguíneo, aumenta la concentración por la liberación de endorfinas, disminuimos la ansiedad y el estrés, además de impedir que nuestro cuerpo esté en una postura estática por ocho o incluso más horas, hay que pensar que bajo este contexto mucha gente se desconecta de su trabajos tras 9 o 10 horas diarias". Alvear indicó que realizar una pausa cada 30 o 45 minutos sería ideal para evitar el estaticismo. "En estos casos, la gente podría realizar la elongación del cuello, del trapecio que también está en esta zona, elongación con movimiento circulares en las manos, elongación en los hombros e incluso también se puede trabajar con las extremidades inferiores con la elongación, ya que también es importante generar una movilidad completa del cuerpo. También durante este proceso es importante la respiración el inhalar y exhalar correctamente para relajar el cuerpo".