Trump enfrenta focos de tensión en vísperas del mitín electoral en Tulsa
ESTADOS UNIDOS. El mandatario anunció que intentará revertir el fallo del Supremo sobre un programa migratorio que él había cancelado y ayer conoció la renuncia de su más joven asesora, por diferencias en el trato de las protestas antirracistas.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció ayer, a menos de 24 horas del mitín electoral en Tulsa, que volverá a intentar cancelar el programa migratorio conocido como Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), después de que este jueves el Tribunal Supremo rechazase su primera tentativa de revocarlo.
En un mensaje a través de Twitter, el mandatario indicó que "en breve" enviarán "documentos mejorados" en los que atenderán los requerimientos del Alto Tribunal, que dio la razón a los abogados que defienden los derechos de cerca de 650.000 jóvenes indocumentados que llegaron al país ilegalmente de la mano de sus padres y que están protegidos actualmente por este amparo.
En su opinión, este jueves "no se perdió ni ganó nada", y solo fue un "punt", una jugada utilizada en fútbol americano para mandar la pelota a campo contrario y alejar el peligro. En lenguaje deportivo, es una patada de "despeje".
"He querido cuidar a los beneficiarios de DACA mejor que los demócratas buenos para nada, pero durante dos años se negaron a negociar. Han abandonado DACA. Según la decisión (del Supremo), los demócratas no pueden hacer ciudadanos a los DACA. ¡No ganaron nada!", dijo Trump a través de Twitter.
El fallo del Supremo fue visto como una inesperada victoria por los cientos de miles de jóvenes inmigrantes amparados contra la deportación, aunque muchos alertaron este mismo jueves que no se podrían fiar de que Trump no volviera a intentar cancelar el programa aprobado en 2012 por su predecesor, Barack Obama, a pesar de la popularidad de DACA, incluso entre los republicanos.
Trump anunció en septiembre de 2017 que cancelaba DACA bajo el argumento de que así ponía presión al Congreso para que demócratas y republicanos alcanzaran un acuerdo sobre este amparo migratorio que concede permiso temporal de trabajo y residencia para los jóvenes que llegaron al país siendo niños. Sin embargo, las demandas contra su decisión fueron llegando y finalmente el caso arribó al Supremo, que este jueves no entró a considerar el programa en sí mismo, sino el procedimiento seguido por el Gobierno en su intento de anularlo.
En opinión del Alto Tribunal, la "rescisión total" de la Administración Trump de DACA fue "arbitraria y caprichosa", aunque dejó la puerta abierta para que el Gobierno intentara de nuevo cerrar el amparo si daba una explicación más detallada.
Trump también afirmó ayer que la municipalidad de Tulsa (Oklahoma) canceló sus planes de imponer un toque de queda nocturno, que habría expulsado del centro de la ciudad a decenas de seguidores del mandatario que acampan desde hace días para verlo en el mitin electoral de hoy. En el masivo evento, donde espera congregar a más de 20.000 seguidores, Trump buscará conquistar adhesiones para la reelección en medio de las continuas protestas.
Las tensiones para Trump se concentraron también alrededor de la escalada antirracista luego del crimen de George Floyd a manos de un policía de Mineápolis.
Mary Elizabeth Taylor, subsecretaria de Estado para asuntos legislativos, presentó su renuncia a raíz del manejo que ha tenido el presidente con las protestas que se han extendido en todo el país. "Los momentos de agitación pueden cambiarte, cambiar la trayectoria de tu vida y moldear tu carácter. Los comentarios y las acciones del presidente en torno a la injusticia racial y los afroamericanos atentan contra mis valores y convicciones", escribió Taylor en su carta de renuncia al Secretario de Estado, Mike Pompeo, según detalló "The Washington Post".
Taylor, de 30 años, es la subsecretaria de Estado para asuntos legislativos más joven en la historia y la primera mujer negra en ocupar el cargo.
Derribar estatuas
En medio de las masivas manifestaciones, derribar estatuas históricas ha sido una tónica y ayer la ciudad de San Francisco decidió retirar el monumento de Cristóbal Colón, tras repetitivos actos vandálicos y una convocatoria que llamaba a lanzarla al mar.
Mientras tanto, en Bélgica, simpatizantes del movimiento Black Lives Matter, destruyeron una estatua del rey colonialista Leopoldo II, quien fue reponsable de millones de muertes en el Congo. También hubo ataques a monumentos en Holanda (un traficante de esclavos) y Reino Unido, que se sumaron a otros de jornadas previas, como la estatua del esclavista Edward Colston que fue arrojada al mar en Bristol y la del conquistador español Juan de Oñate, en EE.UU., que fue retirada tras un violento incidente en Alburquerque.