La libertad de viajar por la ciudad en un skate
En la parrilla de HBO está "Betty", una refrescante serie de la cineasta Crystal Moselle ("The Wolfpack") que enfoca su lente en un grupo de chicas skaters de Nueva York.
Uno de los argumentos de la gran cineasta argentina Lucrecia Martel, para explicar el nulo interés que tiene en las series, apunta al conservadurismo formal que el género ha instalado.
"En términos narrativos de imagen y sonido, lo que se había conseguido ya con los documentales y ciertas películas era más rico que lo que están haciendo las series, que son otra vez el puro argumento, una estructura mecánica y decimonónica por más que esté bien hecha. Las series nos han devuelto a la novela del siglo XIX", dijo en una entrevista con el diario español El País.
Lo cierto es que, a esta altura del juego, hay realizadores que se han atrevido a desafiar la tiranía del argumento con nuevas operaciones. No es casualidad que todos vengan del mundo del cine. Un buen ejemplo es "The Eddy", serie de Netflix en la que participa Damien Chazelle ("Whiplash", "La La Land") que diluye su trama en un fresco cargado de vida, realidad y jazz.
"Betty" también podría instalarse en la misma trinchera de disidencias televisivas. Es el último secreto mejor guardado de HBO. Está ahí escondida en la parrilla televisiva y en el streaming del canal (HBO-Go), donde hace unos días subieron todos los capítulos.
Su responsable es Crystal Moselle, cineasta estadounidense que en 2015 sorprendió con "The Wolfpack", documental centrado en seis hermanos que viven encerrados en contra de su voluntad en un departamento de Nueva York y solo conocen el mundo a través de las películas que consumen obsesivamente.
Su segundo largometraje, estrenado el año 2018 en el festival de Sundance, es "Skate Kitchen", centrado en una skater adolescente que contrarresta su soledad suburbana con la vida y las amistades que encuentra en la calle. "Betty" se desprende directamente de esa obra.
Una clave para comprender su singularidad es que no hay actores en el elenco. Moselle vio a un grupo de adolescentes patinando en la calle y decidió filmarlas, sumándose así -desde el universo femenino- a una larga tradición de cineastas independientes estadounidenses que se han obsesionado por el skateboard urbano como Gus Van Sant ("Paranoid Park") y Larry Clark ("Kids").
"Betty" también entiende esta subcultura como liberación. Janay, Honeybear, Kirt, Indigo y Camille -conocidas como Bettys en el ambiente skater- encuentran en la ciudad una zona de pertenencia. Moselle registra sus conversaciones, sus interacciones con otros personajes, conflictos, sus hábitos adolescentes. Como en las mejores películas independientes de los 90, el objetivo acá es retratar el ocio con un toque documental que asegura frescura. Si bien queda claro que son mujeres en un ambiente dominado por hombres, la serie no se detiene demasiado en eso. Tampoco en los problemas de las chicas, aunque están ahí presentes como telón de fondo. "Betty" no antepone discursos ni esquemas narrativos a su misión de observar y transmitir las sensaciones estivales en parques, piscinas y en esa pista de patinaje gigantesca que puede ser una ciudad.
Las "Bettys" son un grupo de chicas de Nueva York que ven pasar la vida sobre un skate.
En resumen
"Betty" es una serie de 6 episodios transmitidos por HBO.
Por Andrés Nazarala R.
Fotograma de la serie