Desocupación en la región llega al 25% e inactivos aumentan en 50 mil personas
TRABAJO. Boletín Laboral CEPR de la Escuela de Negocios de la U. Adolfo Ibáñez, sumó a los cesantes, y a quienes han salido del mercado laboral y han desistido de buscar un nuevo empleo.
Una desocupación "ampliada" del 25,7%, contando cesantes e inactivos, reportó el último Boletín Laboral realizado por el Centro de Economía y Política Regional (CEPR), de la Escuela de Negocios de la U. Adolfo Ibáñez, en la región de Antofagasta. Es decir que uno de cada cuatro habitantes que tienen deseos de trabajar en esta región, están sin empleo.
El informe, que utilizó los datos publicados por el INE respecto a los meses de marzo, abril y mayo del 2019 para contrastarlos con el mismo periodo de tiempo, pero del año en curso (además de utilizar datos complementarios de otras encuestas oficiales), logró establecer que ya son más de 50 mil las personas este trimestre que se suman a las cifras de inactivos en la región, llegando a unas 222 mil.
Inactivos
La razón principal de esto, según se explica en el documento, se debe a que quienes están "inactivos" (en edad y condiciones de trabajar, pero que no están buscando empleo), están esperando que mejore la situación laboral una vez pase la pandemia.
Sobre el punto, el académico de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI), Patricio Aroca, explicó que aquellos que recién han perdido sus trabajos, tienden a tener un periodo de inactividad en estas circunstancias, ya que tienen una mirada más pesimista respecto de volver a conseguir otro.
"La principal razón de que aquellos que pierden su trabajo no salen a buscar otro (convirtiéndose en inactivos), es que piensan que no hay trabajo y van a esperar el repunte del mercado. En este sentido, Antofagasta ya tenía tasas altas de desempleo, lo que probablemente refuerza el pesimismo de los trabajadores que pierden su empleo", manifestó.
Acotó que muchas de estas personas, dadas las cifras regionales de contagio de coronavirus, "temen no encontrar, o contagiarse y no salen a buscar empleo".
Más afectados
El reporte concluye que "esto refleja un escenario muy negativo y un cambio estructural en el mercado laboral, ya que será difícil generar todos los puestos de trabajo después que pase la pandemia para este significativo grupo de habitantes de la Región de Antofagasta. Esto refleja también la falta de una política particular para Antofagasta como zona minera que tiene un ciclo productivo asociado al cobre y que no sigue el patrón nacional".
El mayor crecimiento de inactivos y desocupados (ver recuadro) está en la población menor a 44 años.
Sobre el punto, Aroca explicó que la razón de esto se encuentra radicada "en que los jóvenes, a diferencias de aquellos trabajadores con más recorrido, no han creado lazos ni han tenido experiencias que los vuelvas imprescindibles en sus lugares de trabajo".
Tras analizar estos indicadores (ocupación, desocupación e inactividad), por nivel educacional, el informe reflejó que aquellas personas con un nivel de educación menor, sufrieron más despidos durante este primer trimestre.
Pobreza
La situación actual, plantea ciertos desafíos que el académico explica, deben tomarse con premura y altura de miras, por parte de las autoridades de turno, con tal de evitar que en el futuro gran parte de la población que durante esta pandemia ha sido afectada con la pérdida de su trabajo, vayan a caer en una situación de pobreza. Específicamente aquellos con un nivel educacional menor.
"El grupo más afectado es el de más bajos ingresos, y en una región de altos ingresos y por lo demás cara, este problema es aún mayor. El desafío por ende de las autoridades regionales, es atraer recursos que el gobierno está destinando para los más pobres, a grupos de trabajadores informales que no han recibido ayuda. La situación demanda recursos y rapidez, para que el impacto no sea tan significativo para este grupo, en esta región", dijo.
"La situación actual de Antofagasta, demanda recursos y rapidez, para que el impacto del desempleo no sea tan significativo para este grupo, en esta región"
Patricio Aroca, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez