Trump defiende monumentos y dice que EE.UU. está cerca de vencer el virus
INDEPENDENCIA. Mandatario denunció una "revolución cultural de izquierda" y aseguró que "nuestra nación está siendo testigo de una campaña despiadada para borrar nuestra historia".
El viernes en la noche, Donald Trump abrió las celebraciones por el Día de la Independencia de Estados Unidos con un acto en el Monte Rushmore, famoso por los rostros de cuatro exmandatarios tallados sobre la montaña, en el que defendió los monumentos del país cuando ha cobrado fuerza el debate sobre su significado en medio de protestas antirracistas.
"El Monte Rushmore será para siempre como un tributo eterno a nuestros antepasados y nuestra libertad", declaró Trump desde una tarima decorada con banderas y que tenía como telón de fondo el imponente monumento en la montaña. "Este monumento nunca será profanado. Estos héroes nunca serán desfigurados. Su legado nunca, nunca será destruido", agregó.
Trump ha criticado la remoción de estatuas o símbolos confederados en medio de las protestas raciales que se han propagado por el país tras la muerte de George Floyd a manos de un policía blanco. "Nuestra nación está siendo testigo de una campaña despiadada para borrar nuestra historia, difamar a nuestros héroes, borrar nuestros valores y adoctrinar a nuestros hijos", alertó el mandatario en un discurso al que asistieron miles de personas y donde no hubo obligación de portar mascarillas, por ejemplo.
Ayer, en medio de un repunte en los casos de coronavirus, con la cifra récord de 11.458 nuevos contagios en Florida (190.052 totales), Trump colgó en redes sociales un video en el que dijo: "Hoy es un día para celebrar muchas cosas diferentes, pero más que nada la libertad. Hace cuatro meses batíamos récords en cualquier ámbito, daba igual el que fuera, si miraban cada cosa por separado, teníamos los mejores números de desempleo, los mejores de empleo, los mejores números en bolsa que nunca tuvimos". Afirmó que "entonces nos golpeó esta terrible plaga de China y ahora estamos a punto de vencerla. Nuestro país se va a recuperar".
Aunque en varios estados anoche se habían cancelado las celebraciones por el 4 de julio y también había llamados a nuevas protestas, Trump se preparaba para el anfitrión de un evento en el jardín de la Casa Blanca con médicos y enfermeros, antes del tradicional castillo de fuegos artificiales en el Mall, la explanada monumental que hay junto a la mansión presidencial.
Acabar con EE.UU.
En su discurso del viernes, el gobernante denunció la que calificó como una "revolución cultural de izquierda" y advirtió que está diseñada para derrocar a la revolución estadounidense. "Al hacerlo, destruirían la misma civilización que rescató a miles de millones de la pobreza, la enfermedad, la violencia y el hambre y que llevó a la humanidad a nuevas alturas de logros, descubrimientos y progresos. Están decididos a derribar cada estatua, símbolo y recuerdo de nuestro patrimonio", acusó el presidente, quien en las elecciones de noviembre próximo buscará su reelección.
"Las turbas enojadas están tratando de derribar las estatuas de nuestros fundadores, desfigurar nuestros monumentos más sagrados y desatar una ola de crímenes violentos en nuestras ciudades", se quejó.
Más estatuas
Benjamin Franklin, Thomas Jefferson, Martin Luther King Jr., Abraham Lincoln y Ronald Reagan serán algunas de las figuras que tendrán un monumento en el "Jardín Nacional de los Héroes Estadounidenses", una iniciativa de Trump, en respuesta a los ataques a estatuas en el país.
"Anuncio la creación de un nuevo monumento a los gigantes de nuestro pasado, estoy firmando una orden nacional para establecer el Jardín Nacional de Héroes Estadounidenses, un vasto parque al aire libre con las estatuas de los más grandes estadounidenses que hayan vivido", proclamó. El lugar elegido para su discurso no fue fortuito, puesto que en el monte Rushmore en Dakota del Sur están esculpidos los rostros de los presidentes George Washington (1789-1797), Thomas Jefferson (1801-1809), Abraham Lincoln (1861-1865) y Theodore Roosevelt (1901-1909).
El jardín de estatuas propuesto por Trump abrirá antes del 4 de julio de 2026, cuando se cumplirá el 250 aniversario de la Declaración de Independencia, y según el mandatario, representará a estadounidenses importantes históricamente que contribuyeron positivamente al país a lo largo de la historia. Es posible que el listado cause controversia tanto por las figuras elegidas como por las ausencias, como es el caso del fallecido presidente republicano Ronald Reagan (1981-1989), el único mandatario de la era moderna que aparece, mientras que se han omitido demócratas como Lyndon Johnson (1963-1969), John F. Kennedy (1961-1963) o Franklin Roosevelt (1933-1945).
Joe Biden pide extirpar el racismo
El exvicepresidente de EE.UU. y virtual candidato demócrata a las elecciones de noviembre, Joe Biden, publicó ayer un mensaje a todos los estadounidenses para que se unan para luchar contra el racismo, con motivo del Día de la Independencia. "Tenemos la oportunidad de extirpar las raíces del racismo sistémico de este país. Tenemos la oportunidad de estar a la altura de las palabras que fundaron esta nación", dijo Biden y agregó que "este 4 de Julio, una de las cosas más patrióticas que pueden hacer es llevar mascarilla".