Ante el repunte de covid, EE.UU. busca reducir el contacto social
PANDEMIA. Mascarillas obligatorias, límites a las concentraciones de personas y toques de queda son parte de las medidas anunciadas en el estado de Florida.
Reducir el contacto social es uno de los objetivos de las nuevas medidas adoptadas para frenar la propagación de la covid-19 en algunos estados de EE.UU. donde los casos han repuntado, como es la situación de Florida, donde ayer se contabilizaron 10.328 contagios nuevos y 90 fallecidos y donde los hospitales viven horas críticas.
Las muertes asociadas al nuevo coronavirus bajaron por primera vez en cuatro días por debajo del centenar, una buena noticia para los floridanos preocupados por la escalada registrada desde mediados de junio, que ha hecho de Florida el tercer estado en número de contagios de un país que es el número uno a nivel mundial.
En Florida, desde el 1 de marzo hasta ayer 337.569 personas se han contagiado y 4.895 han fallecido por covid, de acuerdo con los datos facilitados por el Departamento estatal de Salud. Miami-Dade, el epicentro de covid-19 en Florida y cuarto condado del país por número de casos, apuntó 3.159 positivos en 24 horas y la cuenta total subió a 81.026, de los cuales 1.274 fueron casos mortales.
Las autoridades de Miami-Dade y sus ciudades, así como las de otros dos condados del sur de Florida, Broward y Palm Beach, con 1.298 y 684 casos nuevos cada uno, anunciaron medidas para tratar de frenar el avance de covid-19 sin ordenar una nueva cuarentena que tendría efectos nefastos en la economía y el empleo.
Toque de queda
Mascarillas obligatorias, límites a las concentraciones de personas no solo en ámbitos públicos y toques de queda desde más temprano son la combinación favorita en estos paquetes.
En Miami Beach desde ayer los residentes y turistas que quieran divertirse, con las restricciones de rigor, en la zona de restaurantes, bares, discotecas y clubes de South Beach, solo podrán hacerlo hasta las 20.00 horas. En ese horario comenzará un toque de queda que en otras ciudades de Miami-Dade no rige para trabajadores esenciales, entre otras excepciones.
Además, las reuniones en domicilios particulares están limitadas a diez personas y los infractores pueden enfrentar cargos penales por comprometer la seguridad.