"Mis emociones están en este vasto desierto"
ANTOFAGASTINIDAD. Francis Espinoza Figueroa, periodista y doctora en Ciencias Políticas.
Francis Espinoza Figueroa es una de la voces más destacadas de la academia local. Esta exalumna del Instituto Santa María, estudió periodismo en la UCN y luego se doctoró en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales en la Universidad de Birmingham, en Inglaterra.
Tiene decenas de publicaciones a su haber y un espacio bien ganado como analista en varios medios de comunicación. Es de naturaleza tímida (lo asume), amante del cine, la literatura y la música (donde su gusto es amplio), pero sobre todo una mujer enamorada de este vasto desierto donde, dice, "todo florece".
¿Qué recuerdos guardas de tu infancia?
-Uyyy, tengo muchos recuerdos, muchos de ellos asociados a la ciudad, aunque también de Santiago y La Serena. Por ejemplo, mis veraneos a las playas del sector sur y, a veces, en el Balneario de Juan López, sólo por el día y en carpa. Algo que me gustaba mucho era un lugar que se llamaba 'Pony Runch' al cual mi papá nos llevaba a montar en ponis y caballos, de ahí mi amor por los equinos. Mi padre era muy activo en su rol de padre y nos llevaba a los circos y a cuánto espectáculo venía a la ciudad. Mi madre no gustaba mucho de acompañarnos a estas actividades, pero sí era la que preparaba las colaciones y todo para que los paseos resultaran. Hay dos recuerdos que me gustan mucho, el cine que tenía el colegio donde estudié, que le llamábamos la 'casa de las brujas' y donde nos llevaban a ver películas religiosas y documentales, y la otra remembranza es la pequeña biblioteca que tenía el colegio, que olía a libro viejo y tenía joyas como Rabindranath Tagore, por ejemplo.
¿Qué personas han sido fundamentales en el tipo de mujer que eres?
-Todas las personas que se han cruzado en mi camino han sido fundamentales en mi vida. He aprendido mucho de ellos/as y podría extenderme infinitamente, pero quisiera destacar a mis padres que apostaron por mi educación desde niña, se privaron de muchas cosas para darnos a mi hermana y a mí una buena educación formal y valórica. También la generosidad de mi familia materna que contribuyó a pagar mi carrera profesional y que me ayudó a salir a estudiar por primera vez fuera del país, el cariño incondicional de mis abuelos paternos y algunos/as profesores/as del colegio y de la universidad.
¿Desde el punto de vista académico, a quién admiras?
-Admiro a muchas mujeres que han dado la batalla por visibilizarnos intelectualmente, como Hannah Arendt y Judith Butler. Mi norte siempre fue la fundadora de mi colegio, la religiosa irlandesa Mary Ward, quien cruzó Europa para ir a Roma a defender el proyecto de mujeres que debían ser educadas formalmente para salir a los espacios públicos. Admiro también a Ferdinad de Saussure, un lingüista suizo que cuando había nada cartografió los lenguajes europeos (indo-dialectos) para desarrollar toda la gama de teorías del lenguaje. Me gustan también los estadounidenses Richard Rorty e Immanuel Wallerstein, quienes han sido consecuentes en sus posturas teóricas, políticas y como activistas críticos de las condiciones neoliberales de la sociedad gringa y la inequidad social que ha imperado el capitalismo internacional.
¿En qué momento de la historia te gustaría haber vivido?
-Yo siempre fui muy fanática de la época ochentera, del período de la onda disco, me parece que fue una época un poco superficial, pero de mucha libertad en todo sentido, me gustaba la alegría de vivir que transmitía la música. Sin embargo, creo que me hubiera gustado vivir en la época de las grandes revoluciones culturales, sociales y políticas, en la época de los 60s, pues se abrazaba la utopía de un mundo mejor y que cada uno/a podía ser artífice de un tremendo cambio social.
¿Qué es lo que más te divierte?
-Me divierte mucho el cine, el teatro y los conciertos de la OSA, que están alcanzado un nivel europeo en calidad musical. Cuando estudiaba mi doctorado en Inglaterra viajaba muy seguido a Stradford Upon Avon, el lugar de nacimiento de William Shakespeare, a disfrutar el teatro de Shakespeare, especialmente las obras históricas y políticas. Debo reconocer que la música tecno y el K-Pop también me gustan.
¿Qué rasgos dirías tú que nos diferencian a los nortinos?
-Los nortinos y nortinas somos muy parecidos a los ingleses, somos aparentemente parcos y fríos, pero en realidad hay que esperarnos para que nos demos en nuestras relaciones sociales, somos gente de trabajo y esfuerzo, y de un gran meritocracia.
¿Qué sentimientos despierta en ti la Región de Antofagasta?
-Yo amo esta región, siempre me ha parecido una región muy internacionalizada por ser ciudad puerto, por lo cual mis emociones están en la dinámica de un vasto desierto donde todo florece y nuestra conexión al mundo con el maravilloso Océano Pacífico.
¿Cuál es tu receta para ser feliz?
- Creo que no hay recetas, porque cada uno/a es un ser distinto, y además la felicidad no es un estado permanente, sólo momentos que se deben atesorar y traerlos de vuelta en tiempos difíciles como éste. Particularmente vivo mi día como si fuera el último, tengo una conciencia profunda de nuestra mortalidad, y si tuviera que dar una receta diría que vivamos la vida con pasión en cada cosa que hagamos porque de seguro nos irá bien, la felicidad está en uno/a, no en los/as otros/as.