Compromiso con la región
Debemos insistir en que lo mejor que le puede ocurrir a la región es alcanzar un acuerdo local amplio de cara al futuro y que se haga cargo de los dolores ciudadanos. Es muy positivo que la industria minera -y otras- apoyen el empleo y la contratación de empresas locales, para crear un clúster poderoso que de una vez nos abra la chance de exportar más que minerales.
Codelco acaba de anunciar su ingreso al clúster minero de la Región de Antofagasta, una medida esperada, considerando el trabajo que se desarrolla en esa corporación y que tiene por foco la contratación de mano de obra local y el desarrollo de empresas prestadoras de servicio regionales, entre otras medidas.
Ante la ausencia de tributos locales, esta parece una de las soluciones más a mano que tiene cualquier territorio -y este, en especial- para compensar en parte, la pérdida que significa el desarrollo de una actividad no renovable.
En esa perspectiva, la decisión de la empresa estatal es positiva, pero tiene un bemol: se retiró del proyecto Calama Plus, una institución nacida hace una década después de los reclamos de Calama para con su calidad de vida. Lamentablemente, la iniciativa pública- privada, nunca prosperó de acuerdo a lo esperado. Una pregunta necesaria es qué puede y debe esperarse de las mineras en su trato con las comunidades. Ciertamente esta es una zona minera, pero el devenir de la industria, su impacto y beneficio no genera conformidad en el territorio que tiene problemas concretos. Al tiempo, también está el desafío de mejorar la eficiencia de la industria y atraer más inversión.
Y es evidente que mientras la industria minera tiene fortalezas económicas y tecnológicas, la sociedad civil y las autoridades, tienen dificultades, pues no tienen un plan claro, no existen consensos elementales y no sabe bien cómo relacionarse con la principal actividad del país, que tampoco se ha allanado -al menos hasta ahora- a un diálogo honesto y horizontal.
Un asunto central, en especial cuando se trata de actividades no renovables, es que apoyen la generación de una actividad industrial robusta en el territorio, con el fin de que este tenga sustentabilidad más allá de la existencia de la industria original.
El compromiso no es solo y no puede ser solo con el presente, sino también con las futuras generaciones.
Es de esperar que el desarrollo del clúster siga tomando fuerza, pero que también las compañías apoyen el desarrollo de las comunidades que las reciben. Es parte de un trato justo y base para construir un pacto que dé paz social para todos.