Minera Sierra Gorda confirmó que al 2023 sólo empleará energías limpias
TRANSICIÓN. La compañía se suma así a Zaldívar, que desde julio opera con fuentes renovables. Centinela y Antucoya lo harán en 2022, y Escondida y Spence a mediados de esta década.
La gran minería de la Región de Antofagasta continúa avanzando hacia un suministro eléctrico exclusivamente a base de fuentes renovables, estrategia que está en sintonía con la política de descarbonización de la matriz energética que impulsa Chile. Así lo grafica el anuncio de Minera Sierra Gorda SCM, que a partir de 2023 utilizará solo este tipo de generación eléctrica para sus procesos.
La minera, propiedad de la estatal polaca KGHM (55%) y la japonesa Sumitono (45%), informó ayer que el cumplimiento de este objetivo estratégico será posible, luego de la suscripción de un contrato de compra de energía con AES Gener que se extenderá hasta diciembre de 2039.
El convenio establece que el consumo anual aproximado de 1.240 GWh de la operación, será abastecido desde el portafolio renovable de la generadora, que incluye energía solar, eólica, hidroeléctrica y baterías. Entrando en vigencia en enero de 2021 por un 40% del consumo, aumentando a 100% desde el año 2023.
La utilización de energías renovables por parte de Sierra Gorda permitirá desplazar un millón de toneladas de CO2 (dióxido de carbono, gas de efecto invernadero) al año, lo que equivale a suministrar energía cero emisiones al 100% de los hogares de la Región durante 2,7 años.
"Damos un nuevo paso para continuar desarrollando una minería más sustentable; el uso de energías renovables nos permitirá dejar de emitir gases de efecto invernadero, y a la vez, mantener una operación eficiente y competitiva, siendo un aporte para la región y el país", expresó el vicepresidente de Asuntos Legales, Corporativos y Sustentabilidad de la minera, Miguel Baeza, tras la firma del acuerdo con la generadora eléctrica de capitales nacionales.
AMSA fue pionera
Una de las cupríferas que ha liderado la transición energética de la industria ha sido Antofagasta Minerals (Amsa). Es así que a partir del pasado 1 de julio Minera Zaldívar comenzó a utilizar sólo fuentes de energía renovables para producir cobre.
Esta meta fue alcanzada luego de firmar un contrato con Colbún en junio de 2018, para asegurar suministro eléctrico a partir de fuentes de energía que no generan emisiones. De esta forma, la operación podrá reemplazar emisiones equivalentes a 350 mil toneladas anuales de gases de efecto invernadero, lo que equivale a sacar de operación a cerca de 87 mil vehículos al año.
A este esfuerzo se sumarán, a partir de 2022, Antucoya y Centinela, según adelantó el presidente ejecutivo de Amsa, Iván Arriagada.
"Todas nuestras compañías cuentan hoy con nuevos contratos de suministro eléctrico a partir de fuentes renovables, los que paulatinamente irán entrando en vigencia durante los próximos meses. A partir del año 2022, toda la energía eléctrica que utilicemos para producir cobre provendrá de fuentes limpias", aseguró el ejecutivo.
Meta de bhp
En 2019 BHP adjudicó a las generadoras eléctricas Enel y Colbún una licitación para el suministro de energía de fuentes 100% renovables para Minera Escondida y Spence, contratos que entrarán en operación a partir de 2021.
Como parte de ese mismo esfuerzo, la multinacional suscribió la Carta de Compromiso con el Marco de Producción Responsable "Copper Mark".
Este sistema de certificación creado por la ICA (International Copper Association) en diciembre de 2019, representa un marco de garantía confiable para demostrar las prácticas de producción responsable de la industria del cobre y su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas.
"La certificación Copper Mark, explicaron desde la compañía minera, va en línea con los avances logrados en materia medioambiental, que permitirán a Escondida y Spence operar con un 100% de energías renovables a mediados de esta década".