Congreso elige a Francisco Sagasti como presidente interino de Perú
POLÍTICA. El congresista del Partido Morado obtuvo amplia mayoría para presidir el Congreso, por lo que será el sucesor del renunciado Merino a partir de hoy y durante ocho meses. Es ingeniero y descendiente de un héroe de la Guerra del Pacífico.
El legislador Francisco Sagasti, del Partido Morado, de tendencia centroliberal, será el próximo presidente de Perú y asumirá hoy el vacío de poder tras la dimisión de Manuel Merino en medio de una grave crisis política y social que llevó a masivas protestas ciudadanas en el país y que dejó al menos dos muertos y siete desaparecidos.
Sagasti, de 76 años, fue electo por el Congreso para presidir su mesa directiva y, en consecuencia, asumirá el proceso de sucesión presidencial normado en la Constitución, que establece que el titular de ese poder del Estado asume la cabeza del Ejecutivo cuando no hay un mandatario.
"No es celebración"
La votación en favor de la lista dirigida por Sagasti, que incluyó presidencia y las tres vicepresidencias de la Mesa, fue de 97 votos a favor y 26 en contra, y con ella finalmente se abre un camino de salida a la crisis política, de legitimidad y de violencia que se desató en Perú, a raíz de la destitución de Martín Vizcarra hace una semana.
Sagasti juramentó ya como Presidente del Congreso y en el momento en que jure la presidencia interina de la República, lo que se estima será hoy durante la tarde, el Congreso quedará en manos de la diputada del Frente Amplio, Mirtha Vázquez.
"Hoy no es un día de celebración porque hemos visto la muerte de dos jóvenes en protestas, planteando democráticamente su punto de vista (...) No podemos cambiar eso, no podemos volverlos a la vida, pero sí podemos desde el Congreso, desde el Ejecutivo hacer las acciones para que esto no vuelva a suceder", dijo Sagasti al iniciar su discurso de juramento.
Sagasti es una figura de relativo consenso con un perfil moderado que puede ayudar a tranquilizar a una ciudadanía hastiada de los intereses evidenciados por los partidos que impusieron la destitución de Vizcarra y la asunción de Merino. De hecho, fue uno de los pocos diputados (solo 19 de 130) que se opusieron a esa destitución por su "carácter ilegítimo, desestabilizador y su alejamiento de la voluntad popular".
El político tendrá al parecer más facilidades que Merino para conformar un gabinete que asegure la celebración de las elecciones generales de 2021 y una transición pacífica del poder en julio.
En total, tendrá ocho meses para ejercer su mandato interinamente.
Veterano ingeniero
Sagasti es muy valorado también por su perfil profesional. Es ingeniero industrial, tiene una maestría en la Universidad Estatal de Pensilvania, y es doctor en investigación de la Escuela de Negocios Wharton de la Universidad de Pensilvania.
Además, trabajó durante varios años como consejero técnico en el Banco Mundial y se ha desempeñado como profesor en dos universidades peruanas y es investigador principal emérito del Foro Nacional Internacional.
Consenso complicado
Desde que se desató la crisis política y social en su país, Sagasti fue un duro crítico de la actuación de las bancadas parlamentarias, puesto que la suya votó en contra de la vacancia de Vizcarra.
Luego de que el Congreso rechazó el domingo una primera lista para presidir el parlamento que encabezaba la frenteamplista Rocío Silva, Sagasti se declaró "desconcertado" porque, según dijo, esa opción buscaba "un cierto equilibrio" frente a la crisis política.
Esa lista, que hubiera supuesto que por primera vez en Perú una mujer asumiera la presidencia, entró a votación tras haber sido consensuada por los portavoces de los partidos.
Sin embargo, en un acto que Sagasti calificó como "traición", muchos de los votos prometidos no llegaron, lo que forzó una nueva jornada de negociación.
Por ese motivo, el Partido Morado decidió impulsar una lista propia que corrió como única, y Sagasti dijo que, tras lo sucedido los últimos días, "la ciudadanía no estaría dispuesta a aceptar un regreso" de Vizcarra al gobierno, una posibilidad que aún está en manos del Tribunal Constitucional.
Durante la jornada hubo otra lista que se postuló a la Mesa Directiva, pero terminó en polémico y fue retirada porque una de las legisladoras que la integraba denunció por Twitter que no había firmado la nómina y que no estaba disponible para participar en el proceso.
97 votos a favor y 26 en