La pandemia del covid-19 que ha tenido en vilo al mundo desde hace un año, pareciera comenzar a ver su fin. Esto porque durante diciembre, la vacuna desarrollada por la farmacéutica estadounidense Pfizer y la empresa alemana BioNTech comenzó a ser administrada a lo largo del mundo, teniendo como primera paciente a una anciana de 90 años en el Reino Unido. En el caso de Chile, el proceso de inoculación comenzó en vísperas de Navidad en el hospital Sótero del Río, siendo la TENS Zulema Riquelme la primera beneficiada. De acuerdo con información de la Universidad de Oxford, al 28 del mes pasado se suministraron más de cuatro millones de dosis del fármaco en el mundo, 8.641 de las cuales pertenecen a nuestro país. De todas formas, y pese a la llegada de 11.700 nuevas dosis de la vacuna Pfizer-BioNTech el jueves recién pasado y que Reino Unido aprobó el uso de la vacuna elaborada por AstraZeneca y la Universidad de Oxford -medicamento por el cual el ministerio de Salud ya tendría un convenio por 4 millones de unidades-, persisten dudas sobre la inoculación, siendo la efectividad de la misma la principal incógnita. La directora de Asuntos Corporativos de Pfizer en Chile, Ana María Karachón, dijo en radio Cooperativa que en el caso de la vacuna ya entregada en territorio nacional "muestra tener las tasas de efectividad contra varias mutaciones, y no tenemos antecedentes que digan que no será efectiva ante la variante británica", a la vez que afirmaba que tenía una eficacia del 95%; bastante más que el fármaco británico recientemente aprobado (79%). Cabe mencionar que de acuerdo con la última encuesta Cadem el porcentaje de personas dispuestas a inocularse va en aumento, pero sigue siendo bajo, pasando de un 36% a un 45%, mientras que un 33% lo haría más adelante. Además de que persiste un grupo (22% de los consultados) que muestran desconfianza ante el medicamento, principalmente, por las posibles consecuencias de este pueda tener (41%).

La crisis hídrica que vive el país sigue golpeando con fuerza la zona central. Pese a que las lluvias del año recién pasado fueron más abundantes que en 2019, marcó el doceavo año consecutivo de sequía, donde el déficit de precipitaciones osciló entre el 15% y el 66% dependiendo de la región. En el caso de Valparaíso, de acuerdo a datos del Informe Climatológico Diario Nacional, publicado el martes 22 de diciembre, la estación Punta Ángeles presentó un 36,7% de déficit, que en el caso de Juan Fernández llega al 19,3%. En el caso de los embalses, la situación tampoco es mucho mejor, tomando en cuenta que Los Aromos, que abastece al Gran Valparaíso y Litoral Norte, está por 1,7 hectómetros por debajo de lo que tenía el año pasado; un magro escenario que comparte con el Lago Peñuelas, que se encontraría con menos de un millón de metros cúbicos, siendo que tiene una capacidad total de 100 millones. "Fue un año todavía muy seco. Llevamos 12 años consecutivos de sequía y nunca en la historia hemos tenido más de cuatro, lo cual demuestra lo profundo y lo grave del cambio climático al cual estamos siendo expuestos", indicó el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, en declaraciones recogidas por el portal de noticias El Mostrador. Desafortunadamente, el panorama no luce mejor de cara, por lo menos, a los primeros meses del año. Esto porque en su boletín para el trimestre de verano, la Dirección Meteorológica de Chile pronosticó que se instalaría el fenómeno de "La Niña", que si bien sería moderado, se trataría del más fuerte en una década, marcando una temporada estival seca desde la costa de la Región de Arica y Parinacota a Tarapacá, sumando a los territorios desde Antofagasta hasta el Maule, con temperaturas "sobre lo normal" hasta Los Lagos. La entidad incluso se aventuró a indicar que hay un 65% de probabilidades de que el fenómeno climático se mantenga para el trimestre de otoño. De confirmarse este último escenario, Chile podría experimentar un 2021 con importantes heladas y bajas precipitaciones.

Siete son los desafíos centrales resumidos en el programa del Presidente electo de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, quien al derrotar al republicano Donald Trump lo transformó en el primer mandatario en ejercicio no reelegido desde 1992, cuando el también demócrata Bill Clinton venció a George H. W. Bush. Biden plantea un programa nacional de detección y rastreo del coronavirus, que incluye test gratuitos para toda la población. Medidas económicas para enfrentar el impacto de la pandemia, como alza del salario mínimo hasta los US$15 por hora; bonos de US$200 al mes a los ciudadanos y fin a los recortes de impuestos. Combate al racismo a través de amplios programas económicos y sociales para apoyar a las minorías. Extensión del esquema de seguro público de salud aprobado cuando era vicepresidente de Obama y un plan para asegurar a un 97% de los estadounidenses. Reincorporación de EE.UU. al Acuerdo del Clima de París, del que Donald Trump se retiró, y que compromete al país a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero hasta un 28% por debajo de las de 2005 antes de 2025. En política exterior busca recuperar la credibilidad de Estados Unidos y restablecer los lazos del país con sus aliados tradicionales, especialmente con los miembros de la OTAN, pero la gran interrogante es cómo enfocará las relaciones con China, sistema del que fue especialmente crítico durante su periodo como vicepresidente. Y en materia de inmigración se anuncia el término de la política de separar a los niños migrantes de sus padres, suprimir el límite al número de peticiones de asilo que pueden presentarse, terminar con las prohibiciones de viajar a EE.UU. de varios países de mayoría musulmana y protección a los "dreamers", inmigrantes a los que sus padres introdujeron irregularmente en el país cuando eran menores y a los que el gobierno de Obama permitió permanecer en el país. El punto es hasta dónde, en medio de la crisis de la pandemia, Biden podrá responder a las expectativas cifradas en torno a su gestión.

De acuerdo al informe anual del Centro de Investigación Económica y Empresarial de Inglaterra, China superará a Estados Unidos para convertirse en la mayor economía del mundo en 2028, cinco años antes de lo estimado, debido a la diferencia en la recuperación de los dos países de la crisis sanitaria. La investigación citada por la agencia Reuters indica que la "hábil gestión de la pandemia" por parte de China, y el impacto del covid-19 en el crecimiento de Occidente, significaron un mejoramiento en el desempeño económico del gigante asiático, que "parece encaminarse a crecer un promedio del 5,7% anual entre 2021 y 2025 antes de desacelerarse al 4,5% anual entre 2026 y 2030. Si bien es probable que Estados Unidos tenga un fuerte repunte posterior a la pandemia en 2021, su crecimiento se desaceleraría al 1,9% anual entre 2022 y 2024, y luego al 1,6%". China es el mayor socio comercial de Chile y según refirió el canciller Andrés Allamand, el 42,5% de las exportaciones nacionales se dirigió a ese país en el mes de octubre. Pero además registra crecientes inversiones aquí: China State Grid International Development Limited, que en 2019 compró Chilquinta Energía y Luz Linares en US$2.230 millones, acordó en noviembre último la adquisición en unos US$3.000 millones del 96.04% de la Compañía General de Electricidad (CGE) a la española Naturgy, con lo que controlaría sobre el 50% de la distribución eléctrica en Chile, dado que CGE cuenta con un 44% de participación en el mercado nacional, lo que la convierte en la mayor distribuidora del país. En una columna en El Mostrador, Manuel Cruzat Valdés recordó además que en abril del año 2017, la empresa china State Power Investment Corporation compró el 100% de la generadora Pacific Hydro, y en marzo de 2018, China Southern Power Grid adquirió el 27.79% de la transmisora Transelec. El tema desató un intenso debate sobre la pertinencia de que empresas estatales extranjeras sean dueñas de compañías chilenas estratégicas que son monopolios regulados por el Estado.

Equipo Reportajes

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MÁS DE OCHO MIL PERSONAS HAN SIDO VACUNADAS EN EL PAÍS.

pese a las últimas precipitaciones, continúa la crisis hídrica.

el colegio Electoral ratificó en diciembre triunfo de biden.

Xi Jinping, al mando de la gran economía que sigue creciendo.