Proceso de vacunación
En lo inmediato llegarán 12 mil fármacos a la región, lo que significará inocular a la totalidad de los equipos médicos y parte de la población de tercera edad. El arribo de las vacunas no significa el fin de la pandemia, pues los seres humanos seguiremos conviviendo con este y otros virus, de modo que los resguardos deben mantenerse.
Un total de 6.125 dosis de la vacuna Pfizer/ Biontech llegaron el pasado lunes a la Región de Antofagasta, con el fin de comenzar una nueva etapa que permita cerrar la pandemia de covid-19.
Si bien es cierto la cifra aún es escasa, reviste un simbolismo muy esperanzador para los trabajadores de la salud y la población en general, porque el inicio de la vacunación es, o puede ser, el comienzo del final de una pandemia que ya cumple un año y que amenaza con determinar también este ejercicio 2021.
Se suman dos situaciones que podrían analizarse en mayor detalle: por un lado estamos sujetos a la disponibilidad de medicamentos de parte de los laboratorios internacionales; no cabe duda de que todo el planeta está reclamando vacunas lo que hará difícil el arribo sistemático y en grandes cantidades a naciones como la nuestra, pues la demanda es tremenda y en todo el globo.
En otro lado, el país debe analizar en toda su propiedad, la urgencia de recuperar un laboratorio productor de vacunas, lo que tuvimos hasta fines de 2006, cuando el gobierno de entonces decidió cerrarlo por cuestiones económicas.
A la luz de lo que hemos visto, debe decirse que este tipo de centros de investigación son una inversión de largo plazo que hay que cuidar y que no pueden ser medidos por los resultados económicos clásicos, tal como si fuera una empresa. Lo mismo ocurre para los museos, las escuelas, los hospitales y el apoyo a las universidades, cuyas dimensiones son más amplias que la búsqueda de pura eficiencia y un objetivo pecuniario.
Por cierto, el arribo de las vacunas no significa el fin de la pandemia, pues los seres humanos seguiremos conviviendo con este y otros virus, de modo que los resguardos deben mantenerse, más aun considerando que se trata de un proceso que recién inicia y durará meses o incluso un año.
El objetivo, como se sabe, es inmunizar primero a los funcionarios de la salud y luego a las personas de tercera edad que pueden ser las más castigadas por el covid-19. A partir de esto, el país comenzará a retomar sus prácticas tan dramáticamente transformadas desde marzo de 2020.