"Ser profesor es cumplir un sueño"
ANTOFAGASTINIDAD. Nibaldo Mardones Segura, profesor.
Nibaldo Antonio Mardones Segura proviene de una familia de profesores y por eso su vínculo con el mundo de la enseñanza se comenzó a crear desde pequeño.
Nació en Taltal en 1947 y a los 20 años egresó como Profesor de Educación Primaria Urbana de la Escuela Normal Superior de Antofagasta.
Entonces inicia una larga trayectoria en las aulas, siendo su primera parada la recién construida Escuela N° 39 (hoy Japón), que -como anécdota- fue entregada sin mobiliario escolar (los niños hacían las tareas en cajones de tomate), asunto que sólo se resolvió tras una marcha a la Intendencia.
Luego trabajó en las escuelas N° 35, N° 15; D-72 Hogar de Menores; D-90 y finalmente en D-72, donde se acogió a jubilación tras 46 años de labor.
¿Qué significa para usted ser profesor?
- Convertir un sueño en realidad. Provengo de una familia de profesores, empezando por mi padre, hermanos, tíos, primos. Desde pequeño me atrajo la profesión. Ver a diario a mi papá, profesor e inspector general en la Escuela Industrial de Taltal y más tarde en la Industrial de Calama; me llevó a pedir a la familia que me enviara a estudiar en Antofagasta en la Escuela Normal, y así mostrar la vocación de servicio que estaba en mi interior.
¿Cuáles fueron los mejores momentos en una sala de clases?
- Pasé muchos momentos felices con los niños y niñas. Recibir su saludo diario, brindar nuevas oportunidades a quien cometió una falta. Recuerdo también mi primer curso, el Tercer Año A, 1967 en la Escuela Nº 39 Corvallis. Además guardo recuerdos de mis 14 años en la Escuela D-72, Hogar de Menores, en la cual trabajé hasta su cierre.
¿Hay algo importante que enseñarle a los jóvenes de hoy?
- A los jóvenes de hoy les diría que deben aprovechar al máximo las confianzas de sus padres y familias y las oportunidades que brinda el sistema en materia educacional. Que se esfuercen en conseguir los objetivos que se proponen, teniendo muy en cuenta sus capacidades y sumando a ellas dedicación, esfuerzo, sacrificio. Todo eso permitirá que cumplan sus metas.
¿Cuáles fueron las principales enseñanzas de sus padres?
- Las principales enseñanzas de mis padres, Nibaldo y Lucía, ya fallecidos, fueron responsabilidad, solidaridad, respeto, justicia, puntualidad y tolerancia. Eliminar el rencor de nuestro interior, y actuar siempre con la verdad por delante, por muy dolorosa que fuera.
¿A quién o quiénes admira?
- Admiro a mis padres, porque me dieron la oportunidad que supe aprovechar al titularme de Profesor; a mis hijas Paola, Lorena; mis nietos Vicente, Paloma y Amanda, por darme la dicha y orgullo de ser padre y abuelo, sentir su afecto, cariño y amor, más aún en los momentos difíciles que vive la humanidad con la pandemia.
¿Qué opinión tiene de los desafíos que enfrenta nuestro país?
- El primer gran desafío es salir airoso de la pandemia que vive su segunda ola y con estadísticas muy preocupantes. Junto con ello, hay que preocuparse del problema económico que afecta a gran parte de los chilenos para que los recursos lleguen oportunamente.
El trabajo de la Asamblea Constituyente para construir una Nueva Constitución también es un desafío y un gran logro de las tantas demandas con la que se manifestó la ciudadanía, en una mayoría abrumadora en el país.
¿Cuál es su mayor deseo para 2021, en lo personal y colectivo?
- Mi mayor deseo en lo personal es volver a reencontrarme con mi familia, amigos, brindar un afectuoso y fraternal abrazo y retomar nuestras habituales reuniones y tertulias presenciales, culminando con un ágape. En lo colectivo, que ojalá gran parte de la población reciba las dosis de vacuna que se ha prometido y que nos permitirá mirar con más optimismo los momentos muy difíciles por la que han pasado miles y miles de compatriotas. Y que la construcción de la nueva Constitución represente fielmente los deseos de sus habitantes y donde esté garantizados por ley, derechos que históricamente han sido vulnerados.
¿Qué aprendizajes debemos internalizar de esta emergencia que nos ha golpeado?
- Que no somos dueños del mundo, nuestro paso es y seguirá siendo de tránsito; que debemos dejar de lado nuestra soberbia y actuar con humildad; que las prioridades de ayer deben dejarse de lado y que sólo manteniendo nuestro autocuidado podemos sortear esta terrible pandemia y así tener luz de esperanza de volver a reencontramos.
¿Cómo cree que será la sociedad post covid?
- Nada será igual a lo vivido hasta marzo de 2020, pienso que para muchos de nosotros, este duro y doloroso aprendizaje, nos ha hecho cambiar nuestras prioridades, siendo el deseo de vivir el primero de ello. Nada es más importante que el derecho a vivir, por ello es que el autocuidado será permanente en el tiempo que nos queda. Espero ver una sociedad más amable, cordial , fraterna, tolerante y sobre todo solidaria, tomando en cuenta lo doloroso y terrible que ha sido la partida de seres queridos y amigos, que se han ido en la soledad más absoluta producto de la pandemia.