Stephanie Vaquer consolida su éxito como única chilena en la lucha libre mexicana
TRAYECTORIA. La deportista contó detalles de su camino al estrellato en el Consejo Mundial de Lucha Libre donde participa en los mayores eventos de la disciplina.
En su tercer combate en México, el 26 de octubre de 2014, Stephanie Vaquer se fracturó la nariz en una pelea con la campeona de lucha libre local, Sádica, algo que en un principio tomó como un aviso de que debía regresar a Chile, sin embargo, decidió olvidar ese incidente para forjar su historia en la misma empresa donde "El Santo" se convirtió en una leyenda de la disciplina alrededor del mundo.
"Tuve una fractura triple en el tabique, casi llegando al pómulo, pensé que hasta ahí llegaba mi carrera. Pasé un año sin entrenarme y cada vez que terminaba de trabajar como mesera y llegaba a mi casa, tomaba el teléfono para llamar a mi familia para decirles que regresaba. Luego me arrepentía", explicó la atleta nacional.
Si la gladiadora de 27 años hubiera tomado ese avión, recuerda la agencia de noticias Efe, hoy no sería la primera luchadora sudamericana en el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL).
Perseguir un sueño
Antes de establecerse en el CMLL, Vaquer se entregó a la lógica. Su amor por la lucha libre nació a los 10 años cuando la veía por televisión y a los 15 empezó a practicarlo, en una época en que no existían profesionales del deporte en Chile.
Tras sus primeros meses de entrenamiento, Vaquer se percató que su profesor no sabía de este deporte por lo que decidió retirarse de la carrera de comercio internacional -que estudiaba en esa época- para trabajar y juntar el dinero suficiente para emigrar a México, en 2013, con sólo 19 años.
"Elegí México porque aquí está la mejor escuela de lucha libre donde se aprenden las bases para construir tu carrera, el saber caer, tener tu cuerpo fuerte para aguantar golpes, saber hacer una llave", contó.
Sus primeros maestros fueron Ferrari, El Villano IV, El Gran Apache y Ricky Marvin, quienes la guiaron en los años que pasó en el circuito independiente, un "terreno sin ley" donde los novatos deben destacar para llamar la atención de empresas como el CMLL.
Vaquer entrenó y perfeccionó un estilo donde combina disciplinas como el jiu jitsu y la lucha olímpica, para llegar a la compañía seis años después.
Debutó el 9 de agosto de 2019, cuando la Arena México presenta su mejor cartel.
"No planee ser la primera sudamericana en el CMLL y espero abrir la puerta y que sean más, hay mucho talento en Sudamérica, solo faltan buenos profesores y guías con conocimiento como los que hay en México", finalizó.
2019 debutó la chilena Vaquer en un evento del CMLL. En aquella ocasión participó de un combate de tríos junto a Dulce Luna y Kaly.
19 años tenía la atleta nacional al momento de radicarse en México para dedicarse a la práctica profesional de la lucha libre.