Al ingresar a calle Julio Montt Salamanca, entre Huamachuco y avenida Bonilla, sector norte de la ciudad, la primera impresión es la de un campo de batalla.

A simple vista queda en evidencia la gran cantidad de piedras desperdigadas y restos de barricadas que aún humean de la noche anterior.

Desde 2019, en el contexto del estallido social, esta zona, considerada el corazón de la Población Bonilla, uno de los sectores más vulnerables de la comuna, ha sido escenario de fuertes enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas policiales, el más reciente de ellos ocurrido este lunes, tras la conmemoración del Día de la Mujer, y que terminó con un nuevo ataque a la Subcomisaría Norte de Antofagasta.

A la fecha este cuartel de Carabineros ha sido atacado en 23 ocasiones, ocho de ellas solo en lo que va de 2021. Incluso, según confirman desde la institución, este recinto policial es el que más episodios de violencia ha reportado a nivel nacional desde fines de 2019.

En el último ataque ocurrido la jornada de este lunes, cerca de 80 individuos protagonizaron hechos de violencia contra la unidad de Carabineros, lanzando objetos contundentes, bombas incendiarias, e incluso disparos, aseguró el oficial a cargo del cuartel, capitán Eduardo Vega.

"La Subcomisaría Norte ya es una unidad emblemática a nivel local y nacional por ser una de las más atacadas. Y lo que ocurrió ayer (lunes) es uno más de estos ataques que realizan distintos sujetos en contra del edificio y los funcionarios policiales", comentó el uniformado.

Sobre los detalles de cómo ocurrieron los hechos de violencia, Vega detalla que "esto comenzó como una marcha pacífica en avenida Bonilla con Nicolás Tirado, con un gran número de mujeres, principalmente menores de edad, y hombres. Y no hubo ningún problema. Sin embargo, cuando esta marcha termina, otros sujetos agresivos ingresan a la plaza (Bicentenario) y comienzan lanzar objetos contundentes, incendiarios y disparos contra la unidad policial y los mismos funcionarios que se encuentran apostados defendiendo la comisaría".

Durante la jornada de ayer circuló en redes sociales un video en que se evidencia que un grupo de sujetos lanzan una serie de elementos incendiarios al interior del cuartel policial, mientras también se logran escuchar estruendos similares a disparos.

Estigmatización

La unidad policial colinda con la Plaza Bicentenario, y esto, según explica el capitán de Carabineros, ha permitido que el edificio sea un blanco fácil ante los reiterados ataques.

Esta desventaja ha obligado a la institución a tomar una serie de medidas para proteger la unidad, como es la instalación de rejas, disposición de zanjas y algunos contenedores para dificultar el acceso al área.

El capitán Vega asegura que además han oficiado al municipio para que reponga algunas secciones del cierre perimetral de la Plaza Bicentenario, sin embargo, esta solicitud a la fecha no ha sido respondida.

Pese a la compleja situación que se vive en este sector de la comuna y a los sucesivos ataques contra la subcomisaría, el uniformado aclara que la relación con la comunidad es buena, y es enfático en señalar que no hay que "estigmatizar" a los vecinos del lugar.

"Hay que separar las aguas. Si bien hemos sufrido constantes ataques, no hay que estigmatizar que todas esas personas son del sector. Acá vive gente humilde, muy sencilla y trabajadora, al igual que muchos chilenos y carabineros. Por lo tanto, nosotros no estigmatizamos que son los vecinos quienes nos vienen a atacar. De hecho, me he reunido con siete juntas de vecinos y todas han coincidido en darle su apoyo a Carabineros en su función y de alguna forma entregarnos más herramientas para erradicar los hechos de violencia en contra de la unidad", precisó el capitán Vega.

Durante los últimos sucesos de violencia, un efectivo policial resultó con una lesión en su mano derecha producto del impacto de un objeto contundente. Durante los primeros meses de 2021, al menos 13 carabineros de esta misma unidad sufrieron lesiones en el contexto de diversos ataques.

Catedral

En otros hechos ocurridos durante la misma jornada, la Fiscalía Local de Antofagasta informó la formalización contra el adolescente de iniciales A. R. G., acusado de participar en el incendio que afectó a la Catedral de Antofagasta la tarde del lunes, en el marco de desórdenes públicos que se generaron tras la convocatoria realizada por el 8M.

"Mientras la marcha se desarrollaba, un grupo de personas, entre ellos el imputado, estaba provocando desórdenes en la manifestación, cuando se acercan a las puertas de la Catedral para iniciar un incendio, fue en ese momento que el adolescente se habría acercado para lanzar un acelerante que contenía en una botella", indicó Carabineros en una declaración.

La Fiscalía solicitó la internación provisoria del menor de edad (equivalente a la prisión preventiva de adulto), quien fue formalizado por los delitos de incendio de un edificio patrimonial y desórdenes públicos. En este caso -se explicó- concurren dos agravantes de responsabilidad: cometer el delito en contra de un lugar destinado al culto religioso y cometer el delito en contexto de conmoción popular.

Sin embargo, el Juzgado de Garantía solo otorgó la sujeción del imputado al Servicio Nacional de Menores por estimar que en este caso estaríamos frente al delito de incendio simple o incluso el de daños, pues el fuego solo alcanzó la puerta de ingreso al templo religioso, que también suma varios ataques.