Waldo Valenzuela Maturana y la Corporación PROA Antofagasta, asumieron la tarea de ofrecer a la comunidad una "Historia del Arte en la Región de Antofagasta". En el ámbito cultural del Norte Grande, aún se deja sentir la necesidad de contar con una obra que acopie el patrimonio artístico más representativo de la nortinidad. La iniciativa es digna de los mejores augurios, porque entre conciudadanos, nobleza obliga.

Para los seguidores de Waldo Valenzuela, pedagogo y pintor, hay coincidencia en que escucharlo siempre ha sido una grata tarea. La pintura y su historia en tierras nortinas son su pasión. Oriundo del viejo Norte Chico, como muchos más, es un típico "antofagastino" que adoptó como su querencia a La Perla del Norte.

Una vida dedicada al arte pictórico, tanto en la enseñanza como en la creación, le permite abordar la historia de la pintura en Antofagasta con suficiente objetividad más una interesante concepción estética que avala cada una de sus apreciaciones.

Su arte de claroscuro lo ofrece a sus espectadores como una invitación para proyectarse hacia la intimidad que define al hombre esencial de las tierras amerindias. El entorno de su pintura, no hace distingo alguno; pinta para todos y si hay afinidad con los valores ancestrales, su universo pictórico parece inundarse con esplendores del realismo mágico. Su punto de vista le facilita el trazado de cualquier boceto y su pintura le permite captar la interioridad que anima y explica cada uno de sus cuadros.

Durante décadas su obra pictórica ha logrado incrementos cualitativos. Su inicial obra paisajística de sello naturalista, fue un poner en práctica sus conocimientos de composición y manejo de su paleta colórica. El desnudo con sus exigencias de luz y sombras vale como un perfeccionamiento de la técnica pictórica. Como algo propio destaca la peculiar dimensión religiosa de su plástica. Pero, el verdadero filón de su pintura está en un ir a la búsqueda de la esencia del hombre autóctono o del ancestro nativo con raíces continentales.

La "Historia del Arte en la Región de Antofagasta" de Waldo Valenzuela representa un aporte cultural que ha de marcar un antes y un después para generaciones de nortinos amantes de las artes plásticas.