El exitoso proceso de vacunación
La noticia fue cubierta por todos los medios internacionales Chile superó a Israel y con esto al resto de los países en el mundo. Chile es el país con más vacunados por cada 100 habitantes en la última semana. Más de 4,2 millones de personas fueron inoculadas desde que se dio comienzo a la campaña de vacunación y recientemente llegó un nuevo cargamento de dosis lo que sigue generando tranquilidad y esperanza en nuestro país. En todo el mundo se habla de cómo Chile se convirtió en un bendito ganador en la carrera por obtener la vacuna contra el covid-19 y de esta forma ha logrado proteger la salud y la vida de todos los chilenos y chilenas. ¿Cómo lo hizo? Un buen precio, una estrategia temprana, participación en ensayos clínicos que fortaleció la posición de Chile en el mundo, una diversa cartera de vacunas y por supuesto, lo que marcó la diferencia con otros países, decisiones tempranas y acertadas del Gobierno de Chile. La pandemia ha resaltado que no es importante si un país es o no desarrollado para enfrentarla. Lo sustancial es cómo se gestionan las crisis y ahí, su gente y sus líderes, son fundamentales. Cabe mencionar que, mientras actores políticos de oposición, de izquierda mayoritariamente, expresaban que la pandemia era un invento del Gobierno y entorpecían el trabajo de éste, el Gobierno trabajaba silencioso para manejar adecuadamente la pandemia. Un correcto diagnóstico señaló que era necesario adquirir más ventiladores mecánicos para afrontar la peor parte de la crisis sanitaria. No olvidemos que hace un año, ningún país en el mundo sabía cómo manejar adecuadamente esta crisis. Hubo desaciertos, puede ser, pero en una situación así no se trata de negligencia ni de una actuación dolosa, sino de aprender en la incertidumbre. No había modelos para tomar, no había soluciones que importar. Sin embargo, la previsión fue fundamental: se iniciaron intensas gestiones para adquirir más ventiladores. Se trajeron al país con una gestión impecable de la red de salud y los insumos necesarios, no tuvimos que exponer a los chilenos ni a nuestros profesionales de la salud al llamado "dilema de la última cama". Ha sido un año de cuarentenas, mascarillas, toques de queda y permisos. Pero, si miramos atrás ¡cuánto hemos avanzado! Hoy, nadie discute la veracidad de la enfermedad; y el proceso de vacunación ha sido un éxito, lo que nos debe alegrar a todos. Tres razones y actores: Gracias a las gestiones del gobierno tuvimos vacunas; gracias al trabajo de miles de hombres y mujeres en los recintos de salud del país, se ha avanzado rápidamente en la vacunación y por supuesto; gracias a la disciplina de los chilenos y chilenas se ha avanzado en forma ordenada y respetando la fila, la unidad siempre da buenos resultados. Nunca ha sido fácil gobernar y me parece justo, como chilena, que hoy le reconozcamos al Gobierno y en especial al Presidente Piñera la llegada de la esperanza, al personal de salud el rápido avance de la vacunación y a los chilenos y chilenas el respeto, generosidad y solidaridad.