Tercer retiro: antofagastinos gastarían principalmente en pago de deudas o inversiones
Pagar deudas, mejorar la casa, invertir en un emprendimiento, dar un pie para adquirir bienes como viviendas y automóviles, mantener una pyme o contar con ahorro disponibles en caso de una emergencia económica, son algunas de las opciones que mencionan los antofagastinos en que utilizarían los recursos de un eventual tercer retiro del 10% de los fondos de pensiones, según detalla un nuevo estudio de Chiledeudas.cl.
Si bien por ahora el proyecto sigue avanzando en el Congreso (ayer pasó la votación en la Cámara Baja), el sondeo realizado por la firma arrojó que un 75% de las personas consultadas señalaron que realizarían un tercer retiro de hasta el 10% de los fondos de pensiones, si es que es aprobado como ley.
En esa línea, el estudio también revela cómo se utilizarían estos recursos, en caso de poder ser retirados desde las administradoras de pensiones. El 39% de los antofagastinos usarían los dineros para invertir en emprendimientos, en mejoras para sus casas o en mantener sus Pymes, mientras que el 15% los destinaría para pagar deudas.
"En este 15% se encuentran personas que luego de los dos retiros de fondos de pensiones, pagaron solamente una parte de su deuda morosa, con lo que ahora volvieron al incumplimiento financiero debido a que no están generando ingresos por el golpe de la pandemia en sus economías", explica el director de Chiledeudas.cl, Guillermo Figueroa.
Por otra parte, un 14% de quienes participaron en el estudio, manifestaron que utilizarían estos fondos de pensiones para la alimentación, exclusivamente, tras perder sus fuentes de ingreso a causa del coronavirus. Otro 20% de la población de Antofagasta, según el mismo informe, ocupará este dinero como base para adquirir bienes como viviendas y automóviles, mientras que el 12% lo usará para ahorro y consumo personal.
650 mil retiros
Cabe señalar que entre el primer y segundo retiro, en la región fueron ingresadas cerca de 650 mil solicitudes para acceder a los fondos de las AFP, con un monto promedio de retiro de $1.680.304, lo que equivale al 36% de del saldo de los afiliados.
"Pese a que los rescates de los fondos de pensiones bajó la morosidad de la gente a nivel nacional, ello es temporal, porque las personas pagaron, en variados casos, solamente algunas cuotas de su deuda total. Lo mismo podría ocurrir en este eventual tercer proceso de retiro del 10% desde las AFP", advierte Figueroa.
Sin fondos
Tras el primer y segundo retiro del 10%, la Superintendencia de Pensiones informó que casi tres millones de personas quedaron con saldo cero en sus cuentas en el país. En caso de aprobarse la idea de un tercer retiro, ese número aumentaría significativamente.
Y las mujeres serían las más perjudicadas, ya que asumiendo que la totalidad de los afiliados solicitara el máximo posible, se estima que en el caso de los hombres, el 32,7% (1,9 millones de afiliados) se quedaría sin saldo; mientras que para las mujeres es el 46,6% (2,4 millones de afiliadas).
La soprano antofagastina Claudia Maureira es una de las afiliadas que vació su cuenta de ahorros previsionales luego de los dos procesos de retiro. Según cuenta la intérprete su caso es una situación muy común entre los trabajadores de la cultura y las artes, quienes - explica- rara vez cuentan con un trabajo estable que les permita ahorrar para la vejez.
"Con los dos retiros me quedé sin saldo en la AFP. Voy a cumplir 40 años arriba del escenario y literalmente no tengo donde caerme muerta. Esto es algo que pasa mucho en los círculos de artistas. Si no nos salen los eventos y no tenemos pegas estables, es muy difícil ahorrar para una jubilación. Hay casos dramáticos de colegas que terminaron viviendo en una pieza o quitándose la vida porque no tenían para sus gastos básicos", comentó Maureira.
Susana Flores también se quedó sin fondos previsionales tras los dos primeros retiros. Ella llegó hace 15 años a vivir a Chile proveniente de Perú. Durante ese tiempo se dedicó a trabajar como asesorara del hogar, aunque siempre de manera informal. Pese a ello cada vez que podía cotizaba de forma independiente. Ahorro que finalmente debió solicitar luego de quedar sin trabajo por la pandemia.
"Durante todo el tiempo que trabajé nunca me pagaron la AFP. En ese momento desconocía que era una obligación del empleador hacerse cargo de las cotizaciones. Recién en el último trabajo que tuve que duró dos años me comenzaron a pagar la AFP, por lo que era muy poco lo que logré ahorrar y ya no me queda dinero después de los retiros", explicó Susana quien actualmente vive en un campamento.
Flores agrega que parte del dinero que recibió lo destinó a una cuenta de ahorro para postular a una vivienda social.