Efe/Redacción
Europa se prepara ansiosa para la temporada estival del hemisferio norte tras otro medio de año de intensas restricciones para frenar la pandemia de covid-19. Aunque la llegada de la variante india preocupa a las autoridades, Reino Unido, Alemania e Italia comenzaron a retomar sus actividades pese al descontrol generado en España tras el relajamiento de las medidas.
Reino Unido dio un significativo paso en su reapertura y autorizó los viajes al extranjero junto con el regreso del funcionamiento de restaurantes en su interior, después de casi cinco meses de restricciones para contener el covid-19.
El país inició ayer este nuevo paso en la desescalada, pese a la inquietud por la expansión de la variante india, sobre todo en el norte de Inglaterra. Reino Unido suma 4,4 millones de contagios y más de 127.000 fallecidos, mientras que ha aplicado 56,6 millones de dosis de vacunas contra covid-19.
El primer ministro británico, Boris Johnson, pidió una "dosis de precaución" por la flexibilización de las medidas y dijo que "cada uno debe contribuir a evitar propagación".
"Tenga cuidado con los riesgos para sus seres queridos, recuerde que el contacto físico es una forma directa de transmitir esta enfermedad", sugirió Johnson.
En Inglaterra, Escocia y Gales, los pubs, bares y restaurantes desde ahora podrán servir a sus clientes en interiores, mientras que reabrieron museos, cines, teatros, estadios deportivos, áreas de juegos para niños y hoteles.
Irlanda del Norte, en tanto, revisará sus reglas de confinamiento el jueves.
Alemania
Con el mismo ánimo Alemania, que ha aplicado 39,4 millones de dosis contra covid-19, sigue levantando progresivamente restricciones regionales, consolidando una tendencia que se va extender aún más en los próximos días gracias al control de la tercera ola y al avance de la vacunación.
Desde ayer, regiones del norte de Alemania reabrieron totalmente al turismo interno, aunque exigen uso de mascarillas y test rápidos de covid-19, tras meses total o parcialmente cerrado, mientras que dos regiones retomaron las clases presenciales.
Además, están previstos nuevos alivios de las restricciones en los próximos días en varios estados federados, como Berlín, Brandeburgo y Hamburgo, con la reapertura del turismo y el sector cultural, junto con restaurantes.
El país se mantiene bajo los 10.000 casos diarios y suma 3,6 millones de contagios con casi 87.000 fallecidos.
Italia optimista
Por su parte, Italia durante esta semana retrasará hasta las 23.00 horas el toque de queda y se eliminará completamente el 21 de junio, tras aplicar 27,2 millones de dosis contra covid-19 y sumar 4,1 millones de contagios con más de 124.000 muertos.
La idea del Gobierno es abrir paulatinamente y la flexibilización será efectiva en regiones con riesgo leve de contagios, conocidas como "zonas amarillas", prácticamente todo el país. El 1 de junio, además, seis regiones con "una situación óptima" serán catalogadas como "zonas blancas", en las que solo se exige el uso de mascarilla.
España sin control
Pese al optimismo de los países europeos sobre el autocuidado de sus ciudadanos, España registró un nuevo fin de semana sin toque de queda y reinó el caos callejero.
Medios locales reportaron multitudinarias fiestas nocturnas llenaron las calles de Barcelona, donde más de 9.000 personas fueron desalojadas, incluyendo 2.000 que celebraban en la playa. Lo mismo se pudo ver en Granada y Sevilla.
9.000 personas fueron dispersadas el fin de semana por fiestas en Barcelona.