El retorno de las clases presenciales
Existe coincidencia en que el regreso gradual a las aulas es una decisión que debe avanzar. La duda es si están dadas todas condiciones para ello. La llegada del invierno y sus bajas temperaturas complica una decisión que debe ser tomada analizando muchos aspectos, más allá de la mera necesidad de volver.
La polémica instalada entre alcaldes y las autoridades de Educación respecto al retorno gradual de las clases presenciales, está lejos de terminar. Los jefes comunales acusan presiones mientras que las autoridades del Mineduc, amparados en estudios que arrojan un bajo porcentaje de aprendizaje de los estudiantes durante la pandemia, aseguran que son pasos que se tienen que dar con prontitud.
A nivel regional no son pocos los colegios particulares que están con el modelo híbrido, que consta de una cantidad de alumnos en las aulas y otros desde sus hogares. Y, según sus propios testimonios, el resultado ha sido favorable tanto para los docentes como para los estudiantes.
La experiencia es positiva, pero la duda es saber si los establecimientos municipalizados están en condiciones de desarrollar esa modalidad. No olvidar que existen aforos, tiempos y otras adecuaciones físicas que deben cumplir las escuelas para estar en condiciones de recibir alumnos.
En la región no todos los municipios presentan el mismo grado de avance en ese sentido. En Antofagasta, la comuna de mayor población y por ende la con más colegios municipales, las autoridades de la corporación que administra la educación, reconocen que no han contado con los recursos para cumplir con los protocolos sanitarios. En consecuencia, no estarían en condiciones de asumir el desafío del retorno gradual a clases presenciales.
Mientras en otros municipios si han logrado avances, pero no están completamente acondicionados para las exigencias.
Se requieren de más recursos. Ello en el entendido que la cantidad de contagios, positividad y ocupación de camas críticas en los hospitales esté en números que aconsejen una mayor movilidad.
Existe coincidencia en que se debe avanzar en el retorno a clases, principalmente por los estudiantes, quienes necesitan cumplir con los niveles de aprendizaje, no obstante, deben tomarse los resguardos respectivos para proteger a los mismos alumnos y a la población en general de los contagios covid.
La llegada del invierno y sus bajas temperaturas complica una decisión que debe ser tomada analizando muchos aspectos, más allá de la mera necesidad de volver.