Con tan solo un año y medio como profesional, María José Vega ha tenido que vivir en carne propia el lado más crudo del Covid-19. Trabaja como coordinadora de camas medias en el Hospital Regional y ha pasado por una rutina que envuelve un constante colapso hospitalario y casos graves que son complicados de rehabilitar. En medio de su agotadora jornada, pide mayor consideración con la salud mental del personal de salud y clama por un mayor entendimiento a la población antofagastina.

¿Cuánto tiempo llevas como kinesióloga y desde cuando trabajas en el hospital?

-Egrese el 2019 por lo cual llevo 1 año y 6 meses de Kinesióloga y desde abril del 2020 estoy trabajando en el Hospital Regional, por lo tanto, llevo 1 año y 2 meses.

¿Cómo y dónde viviste tu infancia?

-En Antofagasta con mi familia, en un entorno cálido que antes del virus podíamos tener sin miedo.

¿Qué fue lo que te llevó a dedicar tu vida a la salud?

-El siempre querer ayudar sin nada a cambio y saber que con los conocimientos necesarios podemos ayudar a rehabilitar, mejorar y fortalecer estilos de vidas.

¿Qué es lo que más te apasiona de tu trabajo?

-Saber que podemos ayudar a mejorar la calidad de vida de cada persona ya sea en su estadía hospitalaria y en su rehabilitación post hospitalaria. A veces se logra con algo tan simple como escucharlos y acompañarlos.

¿De qué manera el Covid ha alterado tu rutina de trabajo?

-Gracias a mi internado conocí la rutina hospitalaria y es bastante diferente, empezando por todos los elementos de protección que debemos usar para poder atender, sin ponernos en riesgo nosotros o a los pacientes. El covid creó una nueva rutina de trabajo la cual es bastante multidisciplinaria entre todos los estamentos, en donde son bastantes reconfortantes todos los avances que logramos pero a la vez es una rutina muy desgastante y fuerte por todas las pérdidas que tenemos de pacientes que no logran vencer esta lucha contra el covid.

¿Qué desafíos son los más urgentes para la región en ese sentido?

-Apoyo para cuidar la salud mental del personal de salud y de la comunidad en general, el covid aumentó el trabajo hospitalario pero desgasta al mismo ritmo que suben los casos.

¿Cómo se convence a la gente de que el Covid sigue estando presente y que aún hay que cuidarse?

-A esta altura ya no se convencieron creo yo. Lástima que cuando se vean afectados ya no tendrán vuelta atrás y su círculo más cercano es el que más afectado estará. Hoy estando en fase 3 se le dio permiso a la gente para que fuera a buscar el virus. Sé que es fuerte decirlo pero ya es la realidad que ellos mismos quieren vivir. Ojalá las personas entendieran todo lo que se sufre estando con el virus y que muchos ya no viven para contarlo.