"El desierto tiene vida en cada uno de sus rincones, con una belleza única"
Carmen Serrano (35) es técnico social de profesión, tiene dos hijos, y actualmente es presidenta de la ONG Raíces Endémicas. Desde hace al menos 8 años su quehacer ha estado enfocado en la protección del medio ambiente como activista participando en diversas organizaciones.
En el ámbito profesional, Serrano se desempeña trabajando con personas cumpliendo condenas, con mujeres víctimas de violencia y adolescentes en procesos judiciales por vulneración de sus derechos.
¿Cuál es la principal enseñanzas que me dejaron mis padres?
-Dentro de todas las enseñanzas que puedo rescatar, una de las más importantes es ser siempre solidaria, humilde y mantener el respeto por los demás.
¿Qué te apasiona de tú profesión u oficio?
-Soy de profesión técnico social y en mis tiempos libres me dedico al activismo socio-ambiental, de mi profesión lo que más me apasiona es el poder ser un agente de cambio en la misma sociedad, en ser un aporte a la vida de personas y familias, sobre todo en aquellas en donde el sistema no les ha brindado las herramientas necesarias para enfrentar situaciones que se van presentando en el transcurso de su vida.
En el activismo medioambiental me apasiona generar consciencia en las personas, polinizar mentes, propiciar el sentido de pertenencia por los territorios y el patrimonio natural y por sobre todo que las personas se informen de la importancia del medio ambiente en la calidad de vida de las personas.
¿Dónde estudiaste y qué recuerdos guardas de esa época?
-De todas mis etapas educacionales, destacó tres momentos. Mi primera etapa educacional fue en una escuela rural ubicada en la desembocadura del río Limarí, el caminar entre quebradas para llegar a la escuela, era lo más lindo... el que fuéramos pocos alumnos y no requerir tantos materiales como lo hacen actualmente... a los 9 años llegué a Antofagasta, mi educación la continué en la Escuela La Bandera, de aquel establecimiento rescato el grato recuerdo de mi profesora María Llanos y en mi etapa de educación media, fue en el Liceo Técnico y de ese proceso rescato la enseñanzas de varios profesores: Patricio Toledo, Carlos Olmedo, Marcia Robles y Jacqueline Pizarro... y también al inspector Rubén Galarce, por los retos cuando llegaba atrasada... algo muy común en mí.
¿Cuál es el recuerdo de mi infancia que tienes más vivo?
-El caminar por el río Limarí para ir a visitar a mis abuelos, quienes vivían a muchas horas de la desembocadura, a los pies del Parque Nacional Fray Jorge... el estar siempre conectado con la naturaleza.
¿Quiénes han sido tú inspiración en la vida?
-Es difícil poder mencionar a solo una persona, en realidad antes de mencionar a una persona, creo que mi mayor inspiración es la naturaleza, de ella he aprendido demasiado y admiro la resiliencia que tiene frente a tanta contaminación y lo noble que sigue siendo con el humano.
De las personas que más admiro, sin duda mi madre María Serrano y mi padre Juan Veliz, son quienes me han enseñado que el amor es una fuente inagotable de energías y que no es la sangre lo que nos hace familia, si no que el respeto y el amor. Hay más personas que admiro demasiado por su pasión, por lo consecuentes que son con sus ideales, por mencionar algunos nombres: Ada Calderón, Alan Pérez, Bastián Salazar, Juan Contreras, Mauricio Quezada, Gabriel Alvial, Rodrigo Castillo, por mencionar algunas personas.
¿Qué lecciones debemos aprender del último tiempo?
-Personalmente la pandemia me pego bien fuerte desde el ámbito emocional, creo que la principal lección que debemos tomar como humanidad, es tomar consciencia de lo que nos rodea, cuidar, respetar y conservar los espacios naturales, está sucediendo cambios desde el ámbito climático y puede que no sea la única pandemia que tengamos en los últimos años, es urgente que como personas cambiemos los hábitos de consumo que tenemos, para que nuestras nuevas generaciones puedan ir de vacaciones en donde abunde la naturaleza.
¿Qué proyectos estás desarrollando?
-Actualmente estoy enfocada al 100% en la consolidación de la Asociación Socio ambiental " Raíces Endémicas", junto a cuatro compañeros, nuestro primer proyecto es salvar Las Vertientes de La Chimba y que estas se declaren humedal urbano... y desde ahí comenzar a trabajar con la comunidad directamente, siempre abordando las necesidades ambientales que se visibilizan en la población.
¿Cuál es el espacio de la región que más te gusta?
-Me gusta toda la región, el desierto tiene vida en cada uno de sus rincones, con una belleza única. Podría nombrar Paposo, las playas de caleta El Cobre, el río Loa, el altiplano, las salitreras, sus geoglifos, Antofagasta es más que solo minería.
antofagastinidad. Carmen Serrano, presidenta ONG Raíces Endémicas.