Paula Hawkins: "Somos más capaces de lo que pensamos de llegar al extremo"
NOVELA. Nuevo libro de la autora de "La chica del tren" sale mañana a la venta.
Efe
No todo el mundo es capaz de matar pero Paula Hawkins, la autora de "La chica del tren", el thriller más vendido de los últimos diez años, considera que somos mucho más susceptibles de "llegar al extremo" de lo que pensamos -incluso matar-, especialmente si nos han hecho sufrir.
"¿De qué sería yo capaz si me ofrecieran la oportunidad de vengarme del que tantísimo daño me hizo? ¿Hasta dónde llegaría?", se pregunta Hawkins, cuestiones de las que habla en "A fuego lento" (Planeta), su última novela que llega mañana a las librerías publicada en castellano y que saldrá simultáneamente en Latinoamérica y España.
Hawkins ambienta su nueva novela en el Londres de la actualidad y en ella explora las razones que pueden llevar a una persona que haya sufrido a matar, a través de tres mujeres que se enfrentan a los prejuicios que la sociedad proyecta sobre ellas.
Pionera del género de la novela negra situada en el ámbito doméstico, los personajes de las novelas de Hawkins son personas corrientes: "No hablamos de espías ni de asesinos en serie ni de nada que quede muy remoto. Estamos hablando de cosas que ocurren cerca, una de las razones por las que a los lectores les interesa".
La autora reconoce que usa los crímenes que aparecen en sus novelas como excusa: "El thriller me da una estructura para la historia oscura que quiero contar, pero no me interesa exactamente el acto de violencia que se comete o la investigación policial, sino la psicología subyacente al crimen y cómo se llega a ese punto en el que alguien se pueda comportar de manera tan extrema".
"Y lo que pasa después, el impacto sobre las víctimas: cómo se relacionan con el trauma, cómo se intentan recuperar o fracasan en el intento... todo eso es lo que me fascina", detalla la escritora.
Superventas
Lo hizo con "La chica del tren", leída por 27 millones de personas en más de 50 países y que estuvo más de cien semanas en la lista de los libros más vendidos de The New York Times; lo repitió con su segunda novela, "Escrito en el agua"; y ahora nuevamente con "A fuego lento".
La historia de esta novela comienza con el hallazgo del cuerpo de un joven asesinado brutalmente en una casa flotante de Londres, lo que desencadena sospechas sobre tres mujeres. Laura es la joven conflictiva que iba a reunirse con la víctima la noche en que murió; Carla, aún de luto por la muerte de un familiar, es tía del joven; y Miriam es la indiscreta vecina que oculta información sobre el caso.
Son tres mujeres que no se conocen, pero que tienen distintas conexiones con la víctima y que, por diferentes razones, viven con resentimiento y esperan el momento de reparar el daño que se les ha hecho.
"Todos somos capaces de llegar muy, muy lejos y de hacer cosas extremas", dice Hawkins, mucho más de lo que pensamos desde nuestras vidas normales y, por eso, ella indaga en las razones que nos llevan a convertirnos en las personas que somos.
Los suyos son personajes solitarios y sometidos a prejuicios y el silencio de muchas personas sobre sus traumas son otras cuestiones que aborda la novelista que estudia así "las estrategias que toma la gente para intentar negociar con su vida después de que les ha pasado algo difícil".